tag:blogger.com,1999:blog-20310377175487624522024-03-13T07:21:24.470+01:00DebajocosteOutlet sobre la actualidad y la vida cotidiana. El título se debe a la historieta "Agosto de bajo coste"; la escribí al comienzo de la crisis, hace ya... Ahora da nombre a este taller al aire libre. Este mes (agosto 2016) estoy construyendo un diccionario de palabras inventadas. Bienvenidos.Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.comBlogger223125tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-7161354365129727902017-11-02T17:35:00.003+01:002017-11-04T13:45:54.842+01:00La 'españolada' de Puigdemont <div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2yKspy2a9BNkm0oJ2_XQzEYiza8vFR8kgo1u6ycx4xjNaVYNsZ-pq4sR4l25qNefD_KVQZapXHLrJPhprgw9v9u29aomE0RgCrktuMdRyfN6qicWxMlrvca6ho3R4uw83okfE1UNakrU/s1600/puigd2.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" data-original-height="224" data-original-width="280" height="256" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi2yKspy2a9BNkm0oJ2_XQzEYiza8vFR8kgo1u6ycx4xjNaVYNsZ-pq4sR4l25qNefD_KVQZapXHLrJPhprgw9v9u29aomE0RgCrktuMdRyfN6qicWxMlrvca6ho3R4uw83okfE1UNakrU/s320/puigd2.jpg" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Foto difundida por @miquelroig en Twitter </td></tr>
</tbody></table>
<b>Carles Puigdemont, el molt honorable protagonista de la
estresante serie política del otoño, trata de presentar en Bruselas la nueva
temporada de ‘El procés’.</b> Mientras él viajaba de forma discreta para gritar a Cataluña 'Ja no sòc aquí’, los partidos que respaldaron su
nombramiento decidían participar en las elecciones autonómicas catalanas del 21
de diciembre, lo que desacredita la hipótesis de que <i>el president </i>o sus consejeros sufran cualquier tipo de persecución por sus
ideas. <b>En la España actual el nacionalismo está permitido; delinquir en su nombre, todavía no. </b></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
A la hora de aquel viernes en que
sus soberanistas señorías entonaban <i>Els Segadors</i>, las terrazas de <i>Madrit</i> se encontraban abarrotadas de
indiferencia. Sólo algún parroquiano hipermovilizado reaccionó a la alerta de su teléfono móvil
levantando de forma enérgica un brazo para reclamar otra caña. <b>A esa misma hora,
sin más alma que el ordenamiento legal, empezaba a acelerar, obsesivo y ruidoso, el
martillo neumático del Estado. </b></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<b>La ficción empezó a desvanecerse en el preciso instante en
que rebasó su propia burbuja y trató de gobernar
la realidad. </b>Hasta entonces salía simpática en las fotos de turistas y demás pescadores de épicas prestadas. Con cierta complicidad exterior, había logrado
disfrazar como revolución democrática lo que no pasaba de involución: una
revuelta alentada desde el poder con fondos públicos, el difuso malestar de un Primer Mundo en crisis, sus emociones inflamadas hasta la cefalea. </div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<b>La rebelión catalana no nació clandestina, como las de verdad, sino que se anunció y proclamó para contagiarse entre pantallas. </b>Y la ficción
funcionó porque, -por fortuna- sin hambre ni opresión que llevarse a la boca, en
ficciones se basaba<b>.</b> En la primera temporada de la serie, <i>‘Espanya ens roba’</i>,
Artur Mas había conseguido travestir su insolidaridad de ilusión patriótica y
envolver la corrupción de CiU en una <i>estelada</i>. En la segunda, <i>‘Votarem’</i>,
Puigdemont, aunque fuera con mentiras, defendió eficazmente sus urnas sin censo,
llamó a una democracia ajena a la ley común, denunció agresiones a quienes blindaban un delito. Ahí acabó todo.<b> Porque el relativo éxito en la organización de la
farsa se precipitó hacia el fracaso al presentar sus tramposos
resultados como vinculantes. </b><br />
<br />
Lo que el Govern podía presentar como una victoria simbólica se transformó de repente en el episodio piloto de una derrota, al consumar con sus constantes apelaciones a la calle la conversión de un problema político en una cuestión de orden público. La primera factura es personal: consejeros destituidos que entran en la cárcel. <b>La segunda, institucional. La </b><b>necesidad de una reflexión sobre la democracia española y sobre la inserción en ella de Cataluña (y del resto de comunidades) ha quedado a</b><b> la fuerza postergada hasta el restablecimiento de la Constitución, que a su vez dificultará ese debate. </b><br />
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Como parecía previsible en un movimiento desprovisto
de racionalidad, la pugna los diferentes actores nacionalistas ha demostrado que no
había más argumento que la huida hacia adelante y ha dejado al aire sus reiteradas imposturas. De la Cataluña
próspera se ha pasado al éxodo empresarial y al significativo aumento del paro en octubre. El deseo de un rápido
reconocimiento internacional apenas se escucha entre el apoyo de Otegi y el estruendoso silencio o rechazo de los países más avanzados. En cuanto al derecho a votar, podrá ejercerse
(¡por cuarta vez desde 2010!) con la participación de todos el 21 de diciembre. </div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
Con una orden de detención contra él, <b>el <i>president </i>todavía reclama un papelito como candidato en<i> ‘155’</i>, la temporada que otros ya han escrito.</b> Parece difícil que se lo den; <b>al autoproclamado aspirante a mártir el traje de héroe
le queda cada vez más grande.</b> El 1 de octubre, aquel domingo que envió a sus
seguidores a ser apaleados, cambió de coche a escondidas para que nadie
molestara su voto. Días más tarde, evitó contestar con claridad a los
requerimientos del Gobierno para certificar si efectivamente había declarado la
independencia antes de suspenderla. El
viernes 27 llegó a ocultar su papeleta cuando el Parlament semivacío aprobó la proclamación de la República
catalana. <b>Ahora, retirado en Bruselas “por prudencia”, prefiere no personarse
ante la Justicia mientras reclama a sus seguidores que defiendan las
instituciones catalanas. </b></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
El último (por ahora) protagonista de <i>‘El procés’</i> se encuentra encerrado
en una pompa de jabón que encoge de forma irreversible.<b> Su salida de España supone, además, uno de los motivos recogidos en el auto de la Audiencia Nacional que envía a la cárcel a sus compañeros destituidos del Govern</b>. Aunque podrá debatirse si es excesiva o políticamente inoportuna<span style="background-color: white;"> <span style="color: orange;"><span style="color: orange;"><a href="http://estaticos.elmundo.es/documentos/2017/11/02/auto_prision_junqueras.pdf">la orden de prisión provisional contra ellos, </a> </span> </span></span>lo cierto es que ni un sólo día dejaron de jactarse de palabra y por escrito de su firme intención de violar la ley. <b>Quienes presumieron de utilizar una institución del Estado, la Generalitat, para romperlo se escandalizan de que ese mismo Estado se
defienda y los persiga. ¿Qué esperaban? </b>Como en aquellas<i> españoladas </i>que sobrevolaban altos ideales
para acabar hundiéndose en lo tragicómico, Puigdemont probablemente preferiría
despertar y comprobar que esta <i>película </i>ha sido un mal sueño. Porque, desvanecida su ínsula Barataria, desde Bruselas sólo transmite miedo y desconcierto ante la realidad que ha engendrado con las ficciones que encabezó. </div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-71793335735496516072017-05-22T13:46:00.000+02:002017-05-23T10:03:14.655+02:00El coche usado de Sánchez y otras claves para entender su victoria <table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEia9P8Gp5h7iuHMGjTbGjYL2807imnNgRUl_ilEFgLEcFXRQJaANTc01jVfxsIwRQ4GiMlVyoQZmgAJ1u9B2xPRbmCgPb7_hIJASQcvLezx_F5rdvu0mw-roiK9DRObIJeKwi5jEkWZYSY/s1600/cocheheredia.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="213" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEia9P8Gp5h7iuHMGjTbGjYL2807imnNgRUl_ilEFgLEcFXRQJaANTc01jVfxsIwRQ4GiMlVyoQZmgAJ1u9B2xPRbmCgPb7_hIJASQcvLezx_F5rdvu0mw-roiK9DRObIJeKwi5jEkWZYSY/s320/cocheheredia.jpg" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Foto: Antonio Heredia/ EL MUNDO</td></tr>
</tbody></table>
<b style="text-align: justify;">A diferencia de Susana Díaz y Patxi López, Pedro Sánchez
llegó el domingo por la tarde en coche a la sede socialista de Ferraz. Salió de madrugada al volante</b><span style="text-align: justify;"> porque las primarias le han renovado la licencia para pilotar el <i>viejo
utilitario rojo</i> del PSOE. ¿Sorprendente? No tanto si se observa con algo de distancia lo ocurrido desde que,<b> en un país en el que casi nadie dimite,
</b>Sánchez renunció a su escaño y a su sueldo para
iniciar una particular vuelta a España transformado en <b>un</b></span><b style="text-align: justify;"> mártir, un resistente, David en la
carretera contra el sistema. </b><span style="text-align: justify;"> Arrancó despacio, pero su relato comenzó a adquirir velocidad hasta demostrarse imparable por numerosos factores. </span><br />
<span style="text-align: justify;"><br /></span>
<span style="text-align: justify;">-</span><b style="text-align: justify;">Las bases de los partidos tienden a ser más radicales
que sus cuadros dirigentes</b><span style="text-align: justify;">, salvo que la disciplina interna o la cercanía de unas elecciones aconseje
moderación para intentar conquistar el centro. La primera era el objetivo a batir. Y, en cuanto a las urnas, no parecen cercanas en el calendario (salvo arrebato de Sánchez). Aun así, parece probable que la inmediatez de unos comicios t</span><span style="text-align: justify;">ampoco le hubiera pasado factura. Desde la fiereza de aquel agrio
cara a cara en diciembre de 2015 con el presidente, el “no a Rajoy” ha calado</span><span style="text-align: justify;"> muy </span><span style="text-align: justify;">hondo entre los militantes socialistas.</span><span style="text-align: justify;"> </span><br />
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-<b>Susana Díaz se rodeó de barones y referentes del pasado
</b>para acompañar, en clave interna, su discurso esencialista. “100% PSOE” frente
a “nuevo PSOE”. Tantas fotos con el poder de antaño, hoy perdido, contribuyeron a trazar una división entre el ayer y el mañana. Dirigentes y militantes ejercen
distintos grados de influencia, pero <b>en las primarias con sufragio secreto cada persona <i>vale</i> un voto.</b> Y la base, como es obvio, pesa mucho más. </div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-La presidenta de
la Junta castigó con un proyectil político muy poderoso a Pedro Sánchez. <b>Ha conducido a los socialistas a los peores resultados de su historia. </b>Es absolutamente
cierto, pero como ese argumento podría proceder de cualquier partido rival, no
termina de ser interiorizado por los militantes del suyo. Cabe una última objeción en
clave demoscópica: <b>¿es responsable Sánchez de que en
2011, cuando él era un desconocido, emergiera una amenazadora alternativa a la izquierda del PSOE?</b> A la vista de esa <i>herencia recibida</i>, ¿son justas las comparaciones?</div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-<b>Las críticas a la inconsistencia de Pedro Sánchez han regresado como un boomerang contra Susana Díaz. </b>Si pensaba eso de él, ¿por
qué le apoyó frente a Eduardo Madina en las anteriores primarias, en julio de 2014? ¿Por qué, una vez distanciados, no
le hizo frente de forma visible y eficaz antes de forzar su caída pública en el Comité Federal? Nunca lo ha explicado de forma convincente. Por su parte, la Gestora sólo construyó el relato de abstención con los hechos consumados y hasta anunció sanciones para quienes por coherencia no la votaron. Mala vía para convencer. </div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-<b>“Tu problema eres tú”, espetó Díaz a Sánchez </b>antes de enumerar las personas de su entorno que le han ido abandonando. Él,
por el contrario, invocó repetidas veces el respeto debido a la militancia. <b>La decisión de
consultar los pactos poselectorales, por inconcreto que fuera el planteamiento, por inusual que pareciera en la tradición socialista, le ha blindado con una armadura a prueba de soledades. </b></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-<b>La abstención<i> por </i>Rajoy se ha transformado ocho meses
después en un "no" a Díaz.</b> El apoyo por omisión al actual presidente justificado en la estabilidad
no debería haber inspirado, a priori, semejante cisma en un 'partido de Gobierno'. Pero el impacto de la recesión, los recortes de la primera legislatura del PP y la irrupción de nuevas fuerzas generaron un marco de pensamiento "el presidente contra todos, todos contra el presidente" que se demostró inmutable hasta la repetición de los comicios. La aritmética parlamentaria acabó entonces de envenenar el dilema: ni Sánchez podía apearse ya de su visceral "no es no" ni, al haber resistido el "sorpasso", los barones tenían poder para obligarle a cambiar de rumbo. Y llegaron las segundas elecciones, y la primera sesión de investidura y, por fin, el traumático sábado 1 de octubre.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1qqCIiZ_C_O3qPasVBaRo2VjVORoEutlTn_l-oZNzjz9plQ2tR1DV2uUyfm39J6fZ13ppQVzoN_d3OEUZdm2IwJO00dY4CEc51Xd_7oZQ4BVGF5isBSa-x83BKCINVpFmVGGGUFd4FwM/s1600/tuitsanchez.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em; text-align: justify;"><img border="0" height="125" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi1qqCIiZ_C_O3qPasVBaRo2VjVORoEutlTn_l-oZNzjz9plQ2tR1DV2uUyfm39J6fZ13ppQVzoN_d3OEUZdm2IwJO00dY4CEc51Xd_7oZQ4BVGF5isBSa-x83BKCINVpFmVGGGUFd4FwM/s320/tuitsanchez.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-<b>Tan importante como la abstención en sí misma ha sido la violenta e impúdica vía elegida para decidirla. </b> El golpe de palacio dejó heridas que aún supuran. A ojos de los militantes, exhibió a un político
derrotado, quizá equivocado pero coherente, víctima de la actuación en la
sombra de quien inmediatamente después de expulsarle del poder interno se ofreció a “coser el partido”. <b>¿A quién de los
dos compraría un militante un coche usado?</b> Esta pregunta, tan manida para evaluar la
confianza personal, resulta muy pertinente. Porque los socialistas de a pie elegían el domingo en las
primarias precisamente al vendedor. La renovación del vehículo de la
socialdemocracia, que ha reivindicado sin fortuna Patxi López, sigue pendiente.<span style="mso-spacerun: yes;"> </span></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-<b>La evolución política de los últimos meses tampoco ha
ayudado a Susana Díaz.</b> Los descubrimientos de nuevos y graves casos de
corrupción en el PP han convertido en vergonzante entre los votantes
socialistas la posición de la Gestora y de su representación parlamentaria pese a las concesiones arrancadas al PP. La
negociación de los Presupuestos está reflejando, además, que Sánchez tenía su parte de razón cuando invitaba al presidente del Gobierno a construir una mayoría
sin el PSOE.</div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-Por sus sesgos sobre grupos de edad y acceso a Internet,
las redes sociales no deben interpretarse sin precauciones como un
termómetro electoral. Pero, al igual que ocurre con Unidos Podemos, sirven de
indicador no de “cuánto”, sino de “cómo”. <b>Parece lógico que los
seguidores de Sánchez, alejados de otros ámbitos de influencia, fueran más activos. Pero esa implicación reflejaba un sentimiento profundo: compromiso, energía espontánea, capacidad de movilización. </b><br />
<b><br /></b></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-Una de las lecturas políticas más trascendentes del 15-M
fue su capacidad para generar un cauce político de indignación a partir de un malestar latente y silencioso. <b>Desde entonces, atravesamos una etapa pública de<i> tripas</i> y emociones. </b>Una época en la que <i>tocar</i> la tecla del corazón añade
posibilidades de éxito político. Sánchez lo hizo, prometió "futuro"; Díaz se ancló a las raíces del partido, al tópico
socialista y andaluz. La presidenta de la Junta se propuso alejarse de "los indignados" y acabó llenando de indignados su propio partido. <span style="mso-spacerun: yes;"> </span></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
-<b>El descrédito de numerosas instituciones por su
actuación antes y durante la crisis ha motivado la identificación –exagerada-
de la democracia representativa con una componenda de las élites.</b> Y todo eso
redunda, de forma indirecta, en un renacido entusiasmo por la democracia directa. Ambas
vías pueden sostener aciertos y errores, pero otra vez Sánchez hizo una lectura
más correcta que Díaz.<b><span style="mso-spacerun: yes;"> ¿Puede un partido político, especialmente si se sitúa en la izquierda, despreciar a la altura de 2016/17 la opinión mayoritaria de sus militantes? </span></b></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoPlainText" style="text-align: justify;">
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<div class="MsoPlainText">
<div style="text-align: justify;">
<b>¿Y ahora?</b> Que la resurrección de Sánchez sea
comprensible con estas claves no implica que, a medio plazo, resulte positiva para el Partido Socialista ni para España. Los bandazos que con justicia se le han reprochado tampoco permiten anticipar qué carretera escogerá. Esa historia se encuentra todavía por escribir. Pero estas primarias implican que las
instituciones (en especial Congreso y Senado) donde está presente el PSOE van a reflejar mejor la sensibilidad política de un sector representativo de la ciudadanía. Y eso suele traducirse en un mayor reconocimiento de su legitimidad. </div>
</div>
<div class="MsoPlainText">
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-11205823888736814682016-11-18T12:20:00.001+01:002016-11-22T22:53:33.832+01:00Donaldismo y Periodisney<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglTInLWFfddkV9Pbt-dwMbPrtCpGlLhNNSFGjErI06E3cAiE69mzRwMQ3C4zBS6FqAvArewl7WzNfpvE4Ds9kToFV09UDNpQkjDNUqxikHuRpl2-yoQPbgc8_KrJSjci48ZLUnxO4qST8/s1600/donaldismo.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEglTInLWFfddkV9Pbt-dwMbPrtCpGlLhNNSFGjErI06E3cAiE69mzRwMQ3C4zBS6FqAvArewl7WzNfpvE4Ds9kToFV09UDNpQkjDNUqxikHuRpl2-yoQPbgc8_KrJSjci48ZLUnxO4qST8/s320/donaldismo.png" width="306" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b>“<i>Colgados</i> ha
habido siempre, lo que pasa es que ahora los sacamos en las noticias”,</b> aseguró
hace casi una década, sin solemnidad alguna pero con irrefutable agudeza, un
editor de informativos con el que trabajé en CNN+. Internet ya tenía presencia, pero la
recesión económica todavía no había estallado, las redes sociales caminaban a
gatas y los movimientos antisistema permanecían anclados en la marginalidad. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
En realidad, <b>ya para entonces conocíamos notables ejemplos
de personajes, entre irreverentes, ignorantes y estrafalarios, aupados al poder
político por sus millones y su popularidad televisiva.</b> Jesús Gil, condenado por
el homicidio involuntario de 56 personas en 1969 e indultado luego por el
propio franquismo, se convirtió en 1987 en el presidente del Atlético de Madrid
y en 1991 en alcalde de Marbella, donde arrasó con una amplísima mayoría
absoluta revalidada en 1995 y 1999. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
A aquel <i>ostentóreo</i>
millonario le oímos prometer limpiar la localidad de “putas e indigentes”, le
vimos en el <i>prime time</i> de Tele5
bañarse en un jacuzzi rodeado de chicas en bikini, le recordamos agrediendo a
puñetazos al dirigente de otro club de fútbol. No deberíamos olvidar que acabó
condenado y en la cárcel por su corrupta gestión en la localidad malagueña, y
con el club de fútbol intervenido. Su modelo dejó honda huella, y no sólo en el
urbanismo: la veintena de ayuntamientos conducidos por su partido hacia la
bancarrota sumaban en 2005 más de la mitad de la deuda municipal con la
Seguridad Social. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifqfHRS9Ww7LooXJDbkZeJE6C5fYXspiKkikxJ2eaMbVB4a7m0bEDFoOP3Y5craZCfZPh_bOc3W0bYutf84fc4IcxzHLXdaCHynhh-H6h-yc0rszZvjYyNOB4hJkHk-krhhILLGuGkAcI/s1600/gilapaisado.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="123" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifqfHRS9Ww7LooXJDbkZeJE6C5fYXspiKkikxJ2eaMbVB4a7m0bEDFoOP3Y5craZCfZPh_bOc3W0bYutf84fc4IcxzHLXdaCHynhh-H6h-yc0rszZvjYyNOB4hJkHk-krhhILLGuGkAcI/s200/gilapaisado.jpg" width="200" /></a></div>
Silvio Berlusconi, propietario del canal español de
televisión donde aquel verano de 1991 -recién investido alcalde de Marbella- refrescó
sus pechos Jesús Gil, es dueño del Milan desde mediados de los 80 y fue primer
ministro de Italia durante unos diez años, repartidos en tres etapas entre 1994
y 2011. “Il Cavaliere”, que esgrimía sus éxitos empresariales como principal
aval político, dimitió en 2011 debido a las presiones de la Unión Europea ante
la gravísima situación económica de su país. <br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Enfrentado durante décadas a los tribunales e impulsado al
poder por la corrupción anterior, promovió una reforma legal que impedía que se
le juzgara, cuando estaba en el cargo, por presuntos delitos anteriores. Ni aun
así pudo mantenerse limpio. En 2015 fue condenado a tres años de cárcel por
sobornar a otro político. Ya antes había sido condenado en primera instancia
–aunque resultó finalmente absuelto- por corrupción de menores. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b>Gil y Berlusconi podían ser lo que hoy sabemos, y nunca trataron
de disimular lo que ya parecían, pero por ricos, rebeldes o <i>rompehuevos</i> resultaban atractivos para
un sector no necesariamente inculto del electorado.</b> Junto al trampolín de sus
negocios, Donald Trump ha gozado de una visibilidad similar. Desde 2004 ha
organizado, producido y actuado como jurado en un <i>reality show</i> de la cadena estadounidense NBC en el que un grupo de
empresarios concursaba por un cuantioso contrato en su corporación. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-kQBFBjfW3mbHbuvRcG-9CrJzQFEM1ql1sq3p95Gl2knxD2I4drc4QiRQexH0n62epY4eu9p1RJa5CWHVqgq4KY3cRi-ogp4R_RT0uNDIUJDbx2vG3r0Y4uK8jOI1idlm5PyQV5zIdic/s1600/apprentice.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj-kQBFBjfW3mbHbuvRcG-9CrJzQFEM1ql1sq3p95Gl2knxD2I4drc4QiRQexH0n62epY4eu9p1RJa5CWHVqgq4KY3cRi-ogp4R_RT0uNDIUJDbx2vG3r0Y4uK8jOI1idlm5PyQV5zIdic/s320/apprentice.jpg" width="236" /></a></div>
No está de más recordar que<b> estos tres héroes populares, ayer
apóstoles y hoy apoteosis del <i>donaldismo</i>,
nacieron del entretenimiento televisivo y fue -además de la judicatura- </b><strong class="markup--strong markup--p-strong">el periodismo quien les desnudó</strong> ante la opinión pública, iluminando sus zonas sombrías para completar el inofensivo retrato iconoclasta que de ellos había dibujado la pantalla de la diversión.<br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<div class="graf graf--p" name="eb8d">
Años después de su inspirada frase, el diagnóstico de mi compañero se ve confirmado por esa extraña, en ocasiones viscosa, confusión de enfoques y géneros que desde webs dedicadas a la mera agregación o al pseudoperiodismo ha terminado salpicando a espacios antes exclusivamente informativos y a las ediciones digitales de los medios más solventes. <b><i>Colgados </i>de diverso pelaje, sin más discurso que su <i>gracieta</i> , gozan de inmerecida presencia
junto a las noticias o entre ellas.</b> Desde<a href="http://migueldelfresno.com/2016/06/la-exaltacion-de-lo-banal.html"><span style="color: orange;"> este escaparate del <i>infotainment,</i> </span></a>donde hay más hueco para
titulares chispeantes que para argumentos, Trump se ha coronado como nuevo presidente
viral de los Estados Unidos. </div>
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b>No siento de entrada que la misión del periodismo haya fracasado por la
llegada, nada banal, del millonario a la Casa Blanca: </b>¿Haría más digno, por ejemplo, a
“The New York Times” haber pedido el voto para él? Pero sí estoy convencido de
que los antaño influyentes medios de referencia habían fallado previamente a
buena parte de los votantes de Trump. Antes de repudiar el simplismo de la
América profunda, que la mayoría no hemos pisado, o de despreciar la
democracia, a la que debemos tanto, podríamos preguntarnos por qué en los
últimos años tanta gente, aquí y allí, sospecha de las grandes cabeceras pese a su
contribución -sí, primordial- al descubrimiento y denuncia de numerosos abusos y
corruptelas políticas, económicas y sociales.
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b>Los informadores (como suena, informadores) deberíamos examinar si, a nuestro nivel, hemos contado bien la recesión, sus angustias y
desigualdades. </b>¿Hemos sido exigentes con los poderes de todo tipo o nos hemos acercado
a ellos hasta diluirnos de forma acrítica en su palabrería? ¿Hemos profundizado en esta
sociedad, compleja y cambiante, o nos estamos abandonando al <i>periodisney </i>de entretenimiento? <br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Parece indiscutible que el creciente ecosistema de Internet
permite la formación de comunidades activas donde antes sólo había corrientes
de pensamiento minoritarias y aisladas. <b>Y
podríamos ahogarnos en lágrimas lamentando que al final predomina lo más visto,
pero ¿acaso no gobierna, en algorítmica equivalencia, el más votado?</b> Es
probable, desde luego, que la mayoría usemos los laberintos de la Red para
reforzar nuestras propias opiniones… tal y como hacíamos con los medios de
comunicación preexistentes.<br />
<br />
<b>Discrepo de que la tendencia de búsquedas de Google sirva sin más para anticipar el triunfo de Trump,</b> aunque sí revelen asociaciones de ideas interesantes en términos de comunicación política y además demuestren -al igual que <i><a href="http://migueldelfresno.com/2015/07/running-president-of-the-united-states-of-america.html"><span style="color: orange;">la conversación social</span></a></i>- que desde el
primer minuto generaba mayor interés que
Hillary Clinton. Más significativo que "cuántos buscaron" debería ser "qué encontraron", lo que nos remite de nuevo a las vías de agua de este periodismo que presumía de vocación cualitativa y se descubre a la deriva en un océano cuyos baremos de éxito son, cada vez más, de naturaleza cuantitavia. Aun así, no me considero nostálgico ni apocalíptico. Bienvenidos sean los datos, siempre y cuando estén a nuestro servicio y no al revés. <br />
</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<strong class="markup--strong markup--p-strong">No comparto, tampoco, que la responsabilidad resida en las redes sociales, </strong>por mucho que en ellas el discurso tienda a desestructurarse, lo divertido anule a lo complejo, <a class="markup--anchor markup--p-anchor" data-href="http://www.poynter.org/2016/the-dangers-of-crying-wolf-with-post-truth/439353/?utm_content=bufferfddbd&utm_medium=social&utm_source=twitter.com&utm_campaign=buffer" href="http://www.poynter.org/2016/the-dangers-of-crying-wolf-with-post-truth/439353/?utm_content=bufferfddbd&utm_medium=social&utm_source=twitter.com&utm_campaign=buffer" target="_blank"><span style="color: orange;">vuelen los bulos</span></a> y las opiniones extremistas se impongan sobre las matizadas. <b>¿Serían mejores si hubiera ganado Hillary Clinton?</b><span style="color: orange;"><span style="color: orange;"><b> </b></span><b><span style="color: orange;"><span style="color: orange;"><span style="color: orange;">¿Por qué<span style="color: orange;"> convertir a las redes, o a Google, en <a href="https://medium.com/whither-news/fake-news-be-careful-what-you-wish-for-7246da863a40#.z0cfkwxni"><span style="color: orange;">garantía</span></a> de veracidad </span></span><span style="color: orange;">si </span>no se </span>lo exigimos al quiosquero cuando apenas existían otros filtros?</span><span style="color: orange;"> </span></b></span>Aunque<strong class="markup--strong markup--p-strong"> </strong>si realmente estuvieran interesadas en mejorar su servicio a la sociedad -y confieso que no lo sé-, podrían acercarse a los medios de comunicación (y en general a los creadores de contenidos de calidad) para promover, financiar y primar propuestas de valor.</div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br />
<div class="graf graf--p" name="4177">
<strong class="markup--strong markup--p-strong">De mi experiencia en las redes sociales he aprendido que la gente no entra en Facebook para informarse.</strong> Puede leer alguna noticia que le llega (junto a chistes, frases inspiradoras y fotos familiares) por el poder de la recomendación de sus amigos y, si acaso, por la promoción que realiza, cobrando, la propia red social. Es el impacto de la audiencia masiva de ésta el que convierte en virales determinadas historias, el mismo impacto que también usan los grandes medios para distribuir su <em class="markup--em markup--p-em">comida rápida</em>. Esos artículos ligeros -que pueden estar bien hechos y no son deliberadamente falsos- reportan un considerable número de visitas a sus webs. <strong class="markup--strong markup--p-strong">No lo demonizaré: las audiencias así incrementadas se transforman en publicidad que paga otros despliegues y las exclusivas. </strong><strong class="markup--strong markup--p-strong">Si la viralidad constituye un objetivo deseable, la obsesión desmedida por “likes”, “shares” y <em class="markup--em markup--p-em">pinchazos </em>puede inducir a desincentivar la excelencia.</strong><br />
<strong class="markup--strong markup--p-strong"><br /></strong></div>
<div class="graf graf--p" name="4177">
<strong class="markup--strong markup--p-strong"></strong></div>
<div class="graf graf--p" name="a993">
A largo plazo, se antoja difícil contener el avance de este mecanismo. Los propietarios y directivos de medios podrían tomar nota de que<span style="color: orange;"> <a class="markup--anchor markup--p-anchor" data-href="http://www.nytimes.com/2016/11/20/business/media/how-fake-news-spreads.html?smid=tw-share&_r=0" href="http://www.nytimes.com/2016/11/20/business/media/how-fake-news-spreads.html?smid=tw-share&_r=0" target="_blank"><strong class="markup--strong markup--p-strong"><span style="color: orange;">el descubrimiento de tantos<i> profesionales </i>de la información mentirosa </span></strong></a></span>coincide con el debilitamiento de las plantillas y las condiciones en que trabajan los profesionales de la información verdadera. <b>Y los lectores deberían aprender que la información cuesta dinero.</b> Sí, la mayoría de los grandes medios estadounidenses se molestó en desenmascarar las incoherencias de Trump. Sus artículos estaban al alcance de los votantes; muchos -eso es lo más preocupante- prefirieron ignorarlos. Es una opción respetable, veremos si acertada.</div>
<br />
Por formidable que haya sido su desarrollo en el último
lustro, ni Facebook ha encumbrado por sí mismo a Trump, ni Twitter encendió por
su cuenta las hoy frustradas primaveras árabes. <b>Las redes multiplican el eco de
un malestar que antes permanecía desconectado y latente, y todavía hoy pasa
desapercibido para otros sistemas de diagnóstico como las encuestas.</b> Sin embargo, esos movimientos
ya circulaban por aguas profundas antes de encontrar su vía de difusión. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
Al final, nuestros análisis sobre las elecciones estadounidenses se estrellan contra una última limitación. <b>Tratamos de explicar de forma racional un voto que da la sensación de guiarse por motivos ajenos al pensamiento. </b>En la era de la gente indignada y del poder bajo (merecida)
sospecha, las emociones, el entretenimiento y hasta las ganas de fastidiar
pueden convertir a un multimillonario poco dado a
pagar impuestos en el símbolo rampante de los antisistema y alzarlo
hasta la cima del <i>establishment</i>. </div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b>Trump, aupado por la desestructuración social, gobernará en plena era de la desestructuración de la información, de los aprendizajes, de la propia democracia. </b>Un contexto en apariencia desfavorable para el periodismo. Aun así, <strong class="markup--strong markup--p-strong">¿por qué vamos a rendirnos en estos días de<a href="http://www.elmundo.es/opinion/2016/11/05/581ccfa4e5fdea4e048b462f.html"><span style="color: orange;"> la posverdad</span></a>?</strong> Como ocurrió con Gil o
Berlusconi, el mandato del magnate representa un incentivo. Para investigar más,
para analizar mejor, para presentar de forma más atractiva, sin bajar el nivel
de exigencia, argumentos más profundos. Si algún año cometimos, <i>porque-le-gusta-a-la-gente</i>, el pecado
profesional de amplificar sin contraste ni reprobación lo que sólo constituían banalidades e insultos, hemos sido condenados a no restar ninguna relevancia al ejercicio
del <i>donaldismo</i> en los próximos
cuatros años. <b><span style="color: orange;"><span style="color: orange;">El ensueño de la desinformación</span> </span>produce monstruos. Las debilidades
del </b><i style="font-weight: bold;">periodisney </i><b>los alimentan hasta que
llegan a devorarnos. </b></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-83794650340644640162016-09-01T12:53:00.000+02:002016-09-01T13:20:51.187+02:00Ficcionario: Zombliguismos <div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>El viajero que comenzó a <i>ficcionar </i>con
el calor hace parada y fonda en la última letra del abecedario. </b>Ni una jornada deambuló
sin brújula. Inhóspito y desvelado como un <i>after-hours</i>,
Google le asistió sin entusiasmo ni desmayo arrojando miguitas que iluminaron desvíos
fructíferos o, al contrario, sepultaron el camino bajo una cordillera de
basura. Allá cada uno con sus preguntas, allá <i>don enteradillo</i> con sus respuestas al hilo de lo que ha leído y
aprendido sobre nosotros. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">En la peor
hipótesis, la mera existencia podría equivaler a un trayecto circular. Si
retornamos al alfa, el <i><b><a href="http://agostodebajocoste.blogspot.com.es/2016/07/ficcionario-agostupefacto-algorismo.html"><span style="color: #38761d;">algorismo</span>,</a></b> </i>comprobamos
que la "vida" nos interesa, a juzgar por las consultas en el buscador global, siete
veces más (1.370.000.000 resultados en español frente a 189.000.000) que la "muerte". <b>Que los datos no nos hagan extraer conclusiones apresuradas: si por
algo se caracterizan los finados es por su pertinaz empecinamiento en ignorar
Internet y otros adelantos mundanos</b>, bien por un desinterés egoísta, por
desistimiento –apenas se plantea "cuándo resucitaré"-, o porque en el más allá
la <i>wifi</i> es de pago, ningún visionario ha implantado la tarifa plana y se antoja
difícil negociar la permanencia. </span><br />
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQ2JkSORCRohc-CaOK6rML5Bs9nk5gcsRThSc84V4Uu8qfMNrLEMicH9DeWeOBSAD-57Jbr4pev-U1ZerAV8M-bTdOWbMSZqhwXE_HZNb_Yfe9a-kWk8raLKvvhVeU8hyjX2tDEC6KdGw/s1600/zombies.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="130" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQ2JkSORCRohc-CaOK6rML5Bs9nk5gcsRThSc84V4Uu8qfMNrLEMicH9DeWeOBSAD-57Jbr4pev-U1ZerAV8M-bTdOWbMSZqhwXE_HZNb_Yfe9a-kWk8raLKvvhVeU8hyjX2tDEC6KdGw/s400/zombies.png" width="400" /></a></div>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">En cuanto a
los vivos, predomina entre sus prioridades la prosaica preocupación por la
"vida laboral". Debe ser porque en este viaje toca remar… Además, e</span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">n una
versión existencialista del "¿qué hay de lo mío?", resulta sorprendente la repetición,
hasta convertirla en sugerencia, de la pregunta "cuándo moriré".</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> Google, que tantas
veces no sabe pero siempre contesta, replica proponiendo un abanico de tests que
combinan la ironía con los estilos de vida. Uno de ellos promete incluso predecir la
fecha exacta del óbito, todos guardan un as en la manga. En caso de error a
favor, el sujeto pasivo nunca va a querellarse. Y en caso de error en contra,
tampoco. Salvo que resucite. </span><br />
<a name='more'></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Casi tanto
como la "muerte" interesan los "zombies" (164 millones de resultados) en sus
diferentes versiones (películas, vídeos, juegos de mesa), lo que sugiere que en
esta era de tragedias en directo preferimos limitar el protagonismo de <i>la parca</i> al entretenimiento. <b>¿Zombies
reales? Aunque no existen de forma constatable, sí proliferan de forma
fehaciente quienes pretenden cazarlos. </b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Cuando nos
ponemos negativos, y motivos casi nunca escasean, todos podemos considerarnos zombies. </b>Efímeros
protagonistas de un <i>cameo</i> en esta experiencia
de usar y probablemente olvidar, llamada a interrumpirse cuando creemos haber
aprendido cómo funciona, inquilinos a medio plazo tan prescindibles como el
conductor de un coche autónomo, condenados de antemano al adiós. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgk3H1S73g6oYO8iZdfEspijAfQTEwushpiAWg3IMyCu9tkZotXne97QJNmhlqf7bns7NHwl2NOc3zhECretREa_-NMEbBR3ddVeIpMCPT-nvZ35zjPQMFlMSe9eX1wlEbVXfR8oLtBOGA/s1600/itaca.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgk3H1S73g6oYO8iZdfEspijAfQTEwushpiAWg3IMyCu9tkZotXne97QJNmhlqf7bns7NHwl2NOc3zhECretREa_-NMEbBR3ddVeIpMCPT-nvZ35zjPQMFlMSe9eX1wlEbVXfR8oLtBOGA/s320/itaca.png" width="180" /></a><span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Y sin
embargo casi siempre nos empeñamos en proyectar lo contrario. </b>Si un metafórico
atardecer de este verano que comienza a agonizar borráramos las lecturas de las
que hemos presumido en Twitter, saliéramos de los grupos de WhatsApp, elimináramos
los amigos y los selfies compartidos en Facebook, nos despojáramos de las
imágenes inspiradoras de Instagram, olvidáramos los aprendizajes que lucimos en
Linkedin… ¿qué sentimientos continuarían latiendo, ocultos bajo el <i>burkini</i> social del éxito? Un
momento: ni siquiera el gran sabelotodo virtual garantiza que podamos encontrarnos en el silencio. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Así que, aunque sea por un instinto de autoprotección,<b> nuestros heterónimos virtuales continuarán </b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>entregados a sus <span style="color: #bf9000;">zombliguismos</span>, protagonizando este </b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>espectáculo de esplendor y decadencia. </b>¿Y nosotros? Nunca llegaremos a la </span><a href="http://www.pixelteca.com/rapsodas/kavafis/itaca.html" style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="color: #990000;">Ítaca</span></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><span style="color: white;"> </span>prometida y por ello nunca dejaremos de buscarla. Por tierra, mar y Google. </span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-49749317342935589072016-08-28T15:00:00.000+02:002016-08-28T15:00:07.869+02:00Ficcionario: YouNoTuber<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Jamás me
habéis visto mover el tupé <i>negro carbón</i> junto a una multitud en el FIB,</b> ni explicar en un tutorial la receta de esas suculentas <i>cupcakes</i>
(antes conocidas como magdalenas), menos aún hacerme un <i>selfie </i>submarino entre sobornados peces de colores. Nunca recorrí ante vuestros ojos ignotos confines de lejanos continentes; mi mejor viaje fueron unos cuantos libros, alguno de ellos francamente
aburrido. Prefiero la música sin muchos decibelios, la lectura en voz baja, la
calle al gimnasio, los bares semivacíos y los vasos medio llenos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrx75Yee_oPK6YofDtAHv-k-TeuJLsP_r6tvHL4GO2dUT7Vu71HGnwizFDb8w2JJAMhygew6P4vP8S8SKEqsfV8eVyKw183w11FcOZM9emR9zrVMllC8IpehfibY1DppFhtpex-wWE7sk/s1600/ynt.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="132" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgrx75Yee_oPK6YofDtAHv-k-TeuJLsP_r6tvHL4GO2dUT7Vu71HGnwizFDb8w2JJAMhygew6P4vP8S8SKEqsfV8eVyKw183w11FcOZM9emR9zrVMllC8IpehfibY1DppFhtpex-wWE7sk/s320/ynt.png" width="320" /></a></div>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>He renunciado a retransmitir el amanecer desde un teléfono móvil. </b>Podrían acusarme de
explotarlo en beneficio propio, reclamarme los derechos de autor, llevarme a
los tribunales, retransmitir la vista en directo, otra carita compungida en el
banquillo, "yo no sabía nada, lo hizo mi pareja", encerrarme en una celda con
cámaras de seguridad, clasificar en un archivo de vídeo cada noche de
cautiverio. Borrarme a escondidas para liberar espacio en el disco duro de esta
desconcertada Humanidad. Delete. Este usuario ha dejado de existir. </span></div>
<a name='more'></a><div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Cuando concluyo
una carrera, muestro las zapatillas. <b>Si remojo los pies, meto tripa y guardo la
<i>tablet. </i></b> No desearía recibir oleadas de
sarcásticos corazoncitos, festejado como el penúltimo <i>hazmellorar</i> de las redes sociales, el protagonista de las noticias
más reídas. Saludaría, llegado el caso, con una sonrisa de circunstancias y me
enterraría en la arena para evitar semejante bochorno. Si me habéis visto, no
os acordéis. </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>A la hora de
la comida comparto el postre y no las fotos,</b> que regatean el
estómago y apenas alimentan el apetito. Anoche, que esto quede entre nosotros, lo
pasé fenomenal. Si me hubiera aburrido, no habría problema. En un elogio envenenado, mi abuela Pi aseguró un día que yo era "de buen conformar". He intentado sobreponerme.</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span><br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">A veces,
pido comprensión, pongo cara de cuerno. Me considero <i>un tímido social</i>, hago pocas muecas y nunca llamé a una chica “reina
mora”. ¿Es grave o sólo inevitable en un ADN castellano? “El show de Truman”,
para el que lo trabaja. Confieso con
picardía y sin remordimiento que he conseguido escapar sin ser retratado de celebraciones plagadas de cámaras. <b>No negaré, arrepentido, que hace dos décadas
y media balbuceé en un <i>karaoke</i>, </b>pero mi presencia se diluirá, qué alivio, con la memoria, si alguno lo recuerdo, del
resto de asistentes. </span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Ni en el
pasado fui viral ni en el futuro aspiro a ser retroviral.</b> Tal vez sólo sea un sieso, un <i>viejuno</i> que nació antes de tiempo. A veces siento que no tengo remedio. O en
realidad, entiéndanlo, pudo suceder que <span style="color: #bf9000;"><b>YouNoTuber </b></span>cobertura. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-44667431817304214022016-08-27T15:00:00.000+02:002016-08-27T15:00:07.499+02:00Ficcionario: Xicoxix<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Hiberno en
las entrañas del lado oscuro de Internet, soy tu futuro replicante. </b>He visto
las fotos de la barbacoa del sábado –muy guapas tus hijas-, leo (e ignoro) las
frases motivadoras de tus cuñados, tantos buenos sentimientos, custodio la <i>pasta</i> del finiquito que la pasada semana
depositaste en el banco. Me inquieté al leer anoche tu consulta sobre esa enfermedad que antes era
larga, dolorosa e innombrable; reconozco
que llegó a preocuparme la pregunta sobre los trámites para testar. Hasta que, antes
de acostarte, hiciste la reserva para esta casa rural. Qué raro que vengas
solo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNEiJB_AlldQqw1HdSUO4-KZl4_BDl09BCKc0Qc-oZlnp8PJUCoTJJgaS378KYjxbqi8YBkT_NSllACNRvXjtcs56lY5ZGP8_Lu__NETy4QdHOfVLm-gDAgKEOqgWQosHf9k9WF4hBMy0/s1600/ducha.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjNEiJB_AlldQqw1HdSUO4-KZl4_BDl09BCKc0Qc-oZlnp8PJUCoTJJgaS378KYjxbqi8YBkT_NSllACNRvXjtcs56lY5ZGP8_Lu__NETy4QdHOfVLm-gDAgKEOqgWQosHf9k9WF4hBMy0/s1600/ducha.jpg" /></a></div>
<div style="text-align: justify;">
<b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Muy cerca
del paraje que conocerás, en el interior del corral contiguo a un laboratorio
clandestino,</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>pastan ahora mismo en
silencio siete ovejas hijas y a la vez hermanas de Dolly.</b> Mezcladas con ellas,
otras siete ovejas negras balan atemorizadas. Esta mañana de fábula el aire
huele a lobo. El experimento empezará tan pronto como aparque aquel camión. Un
investigador sin demasiados escrúpulos animales tratará de observar cuántos
miedos viajan impresos en el ADN y cuáles se aprenden. Después de poner a
remojo la bata ensangrentada, limpiar la escopeta y guardar sus grabaciones en
una web cifrada tiene previsto escuchar a Bach mientras pasea por el monte. Eso
le relaja. Pero no te preocupes, nunca molesta a otros huéspedes.</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><a name='more'></a> <o:p></o:p></span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">A primera
hora de esta tarde, tú no lo sabes, hay programada una sesión experimental en la
clínica de la carretera, la del cartel “cerrado por vacaciones” . Acudirán tres
voluntarios. Observarán en silencio, sucesivamente, secuencias de imágenes turbadoras.
Un niño que llora junto a la gasolinera, la tormenta eléctrica que estalla con
furia en campo abierto,</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">ese lobo que
ataca con saña a catorce ovejas. Al concluir, el estudiante que prepara
oposiciones manifestará su alivio por librarse del casco con sensores
electroencefalográficos. <b>"Hace mucho calor ahí dentro", comentará al cruzar la
puerta, a los dos jóvenes que esperan fuera.</b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>
</b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Ambos, idénticos a él, reaccionarán con indiferencia. Con la misma,
exacta, amenazadora indiferencia con que él se despedirá sin detenerse. </b>Le
gusta ver ponerse el sol desde la ventana de su habitación. Coincidiréis en la
cena, pero no te contará nada.</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Un rato más
tarde, justo después de presentarte a mi madre, te ducharás en tu habitación y entonces… ,
digamos por acortar, naceré con la edad, próxima a la jubilación, que tienes
ahora. <b>Desde que desentrañé el quiz, me he reproducido decenas de veces.</b> En el
siniestro investigador, en el estudiante, hasta en la oveja que escapa cojeando. La obra de una vida entera. Procesar
conexiones y reprogramar datos hasta transformar la posibilidad en determinismo.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">¿Un éxito, reconocimientos, el Nobel?
<b>Nunca cedo a la autocomplacencia. </b>Cuando me siento demasiado poderoso, bajo a
la calle y después de curiosear en varios bares entro -una vez más- en el mismo
restaurante gallego. Invariablemente pregunto al camarero si me recomendaría
una caña con limón o un tinto de verano. “Depende”, suele decir. Siempre
pido ambos y no bebo ninguno, agradecido a Dios por medirme a tan encendido
defensor del libre albedrío. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-76220835771393846432016-08-26T15:00:00.000+02:002016-08-31T00:06:50.138+02:00Ficcionario: Wifidictos<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
</div>
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhofm8srvp0ahX3Be2CNcbgSkcDfptdcNucOkS_2Ilh4GcIir6g6SnZz-6mqPgWeebnYQc3iSnDSdRhWAMj2aC4vDD80SsjSz0vFxC8sIL9ACV0pbh-XKB8yYNGEr-RVkZ7DPQRTcNB3Wk/s1600/postwifi.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhofm8srvp0ahX3Be2CNcbgSkcDfptdcNucOkS_2Ilh4GcIir6g6SnZz-6mqPgWeebnYQc3iSnDSdRhWAMj2aC4vDD80SsjSz0vFxC8sIL9ACV0pbh-XKB8yYNGEr-RVkZ7DPQRTcNB3Wk/s320/postwifi.png" width="308" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Si a la hora
de la cena comenzara a inclinarse <i>el Titanic</i></b><i>,</i> algún pasajero con habilidades
tecnológicas se las ingeniaría para retransmitir en directo el drama (y el
concierto del pianista) por Periscope. Si al amanecer se desplomara un
rascacielos, decenas de personas mostrarían de mañana por Facebook Live a los
equipos de salvamento rastreando indicios de vida entre los escombros. Pero,
¿qué podríamos hacer si esta tarde se hundieran a la vez y por un espacio
prolongado de tiempo las redes inalámbricas? <b>¿Cómo asumiríamos la pérdida del
acceso móvil e instantáneo a Internet?</b> ¿Qué sentimientos nos suscitaría, por
ejemplo, un teléfono deconstruido en
dispositivo que sólo sirve para hablar o una tableta <i>tonta</i>?<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El fundador
de Facebook, Mark Zuckerberg, presentó en 2014 un proyecto de su Laboratorio para
extender, recurriendo incluso a drones, la conexión a Internet hasta los
rincones más remotos del planeta. <b>Citius, altius, wifius, la Red quedaba
consagrada por uno de sus más respetados santones como autopista directa hacia
la civilización. </b>Desconocemos todavía la acogida y el impacto de su empeño entre
las tribus de la Amazonia profunda (y entre sus antropólogos de cabecera), y
hasta qué punto puede ayudarles o fastidiarles que les saquen a la fuerza y en
taparrabos del armario analógico. <b> </b></span><br />
<a name='more'></a><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Unos años
antes, el 15-M ya había presentado la wifi sin barreras como una expresión de
la democracia directa, un símbolo de la fraternidad universal. Los acampados en
Sol invitaban a abrir las conexiones para que sus llamadas a la utopía no
encontraran diques, como si derribaran "La Muralla" que cantaron Víctor Manuel
y Ana Belén. </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Puede que no llegue, de acuerdo, a la ejemplar generosidad corpórea
del amor libre o de donar sangre, pero constituyó una especia de hermandad callejera y digital que
luego ha cuajado en las urnas. </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Ironías tecnológicas, la empresa que después se
propuso conectar Madrid, Gowex, se encuentra hoy destripada, con los cables al
aire y pendiente de juicio en la Audiencia Nacional por falsear sus cuentas.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"> <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>La vida es
eso que pasa mientras tratamos de acceder a una wifi pública.</b> Lo han aprendido los
adolescentes, que cediendo a sus apetencias picotean de señal en señal sin
adoptar las medidas profilácticas adecuadas para evitar contagios no deseados. A
menudo caminan inquietos, moviendo el terminal como si fueran zahoríes, en un angustioso desvelo que les lleva a pedir la contraseña antes de dar las buenas
tardes cuando van de visita a casa de la
abuela. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Jóvenes o
maduros, <b><span style="color: #bf9000;">los wifidictos</span></b> también experimentan un perceptible desasosiego a campo
abierto. Echan la mano de forma inconsciente al bolso y regresan con ella vacía
y el fastidio en el rostro. Preferirían acomodarse en universos físicamente
cerrados, donde ensimismarse como gallinitas ponedoras para volar sin cables
hacia el espacio exterior ignorando lo que consideran un entorno inmediato poco
apetecible. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mientras
Zuckerberg calibra si es viable la vida eterna online, el dueño de un bar del
condado inglés de Sussex ha decidido convertir a sus clientes en eremitas del
siglo XXI inhibiendo todas las señales electromagnéticas en el interior. Si <i>el mono</i> les hace darse a la bebida, tendrán
por delante una decena de erráticos pasos hasta la puerta para calibrar si
merece la pena compartirlo en directo. En la misma tendencia<i> offline</i>, <b>la
empresa “Into the tribe” organiza vacaciones de desintoxicación digital… de una semana de una duración.</b> A juzgar por
las quejas que uno lee en Twitter, hay averías más largas (y dañinas). Espontáneos,
auténticos y felices posan los participantes en las "vacaciones sin" para los
perfiles de esta firma en seis (sí, seis) redes sociales. La desconexión, si breve y pregonada, dos
veces buena... para el promotor. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-92171817881741043122016-08-25T15:00:00.000+02:002016-08-25T15:00:03.836+02:00Ficcionario: Virgulitis<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqM-4y8e0PLBm12BvkJTiwx0WMr8Le_YO53QTpTjT9OeHtk5v2pXIYsRZvp1gG_gCa7GPMIWTMT98ErilGiake97YurULsmwA1L64EODhARpGWVm8OMX-RHdMG2F19S3LarZcd1E52rmM/s1600/virgulitis.png" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img border="0" height="184" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjqM-4y8e0PLBm12BvkJTiwx0WMr8Le_YO53QTpTjT9OeHtk5v2pXIYsRZvp1gG_gCa7GPMIWTMT98ErilGiake97YurULsmwA1L64EODhARpGWVm8OMX-RHdMG2F19S3LarZcd1E52rmM/s320/virgulitis.png" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>La encontré
un jueves por casualidad, al agacharme a rescatar una moneda suicida.</b> Estaba
junto a la pata de la cama, todavía cerca del libro. Le faltaba una letra, tenía
rotas otras dos. Yacía exánime y avergonzada, entre el atrevimiento
de quien emprende una loca huida y el muy humano pudor del fracaso. <b>Tendida a
su lado, una virgulilla trataba de ocultarse bajo una pelusa. </b>Saqué el cassette de
Bruce Springsteen y deposité a la agonizante con sus miembros fracturados en la
caja de plástico transparente. Como tantas veces había escuchado, rodeé todo
con minúsculos pedacitos de hielo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El<i>
palambulatorio </i>se encontraba casi vacío. No tuve que dar demasiadas
explicaciones; los accidentes son frecuentes en verano. Nos atendió un médico en prácticas. Se mostró desconcertado. Aunque en esta época acuden pocos
enfermos, admitió que apenas tenía tiempo para leer. <b>Pidió ayuda de forma
discreta a un par de compañeros con más trienios, bolígrafos y dioptrías.</b>
¿Volante para el especialista? No disponíamos de tanto tiempo. ¿Traslado a
Urgencias? ¿Cuánto tardaría la ambulancia?</span></div>
<a name='more'></a><o:p></o:p><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">"Tiene mala
pinta", dictaminó un empleado de mantenimiento mientras trataba de averiguar de
dónde provenía aquel olor a cloaca. El consejo de sabios integrado por
el personal en pleno, el representante de un laboratorio y el frutero <i>cronopio</i>
de enfrente, que había acudido a recoger unas recetas para <i>lo</i> de su señora, dictaminó que había que operar. <b>¿Quedaría bien?
Nadie quiso <i>mojarse. </i><o:p></o:p></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b><br /></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">La
telefonista, lectora ocasional de<i> ebooks</i> románticos, sugirió con buen criterio
practicarla antes un análisis de urgencia. <b>La enfermera del <i>palaboratorio</i> había
salido a desayunar.</b> Regresó apresurada, con el morro torcido y la bata decorada
con migas de croissant integral. Contra todo pronóstico, la prueba arrojó algo
de luz. Las lesiones eran fruto de la caída pero la palabra había sufrido antes
un desgaste devastador. <b>Algún escritor desaprensivo –y mira que me gustaba…- la repitió por
sonoridad, la sobreexplotó en metáforas devastadoras, la exprimió hasta el
agotamiento. </b>Primero se inflamó la vírgulilla y una complicación posterior
extendió la infección al resto de las letras. Dado el tiempo transcurrido, se
antojaba imposible reimplantar los
miembros amputados y devolverle su aspecto original. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Fueron
ochenta y siete minutos de indescriptible angustia, de citas enjundiosas y
opiniones vanas. Tras pasar por las intuitivas, erráticas pinzas de aquel
gabinete de crisis, <b>el rimbombante adjetivo volvía a recuperar el pulso… transformado en una improbable interjección.</b>
Quedará a salvo de noticieros, boletines oficiales, prospectos de medicamentos. Permanecerá ingresada en un <i>palambique </i>un par
de meses, hasta que pueda destilar nuevos significados que le permitan valerse
por sí misma. Con suerte, <b>quizá le reconozcan la incapacidad permanente,</b> la
honrosa jubilación en un <i>ficcionario </i>descriptivo donde pueda descansar el resto
de sus días. <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">¿Y la
virgulilla? No pudimos salvarla. </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Pero aprovechando la confusión se refugió en un
Vademecum, inició una nueva vida, se
amancebó con una “z” resabiada y ahora quiere estudiar <i>Mediziña. </i></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-90215806703909332022016-08-24T15:00:00.000+02:002016-08-24T15:00:19.713+02:00Ficcionario: Ultransversal<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqAttMpg7Dm43a4L-ibi0T3hIfhAjeMTzorw_xQKgRNuyVlbdan58m7VafOhwS3PAsewSPdsM0MNEdty2oPiavrq9PvfS0iVoUuZus0zthPj2qGsjD1qWU-a-ZuLNwP1kwqLW2GHFJrjw/s1600/ut2.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqAttMpg7Dm43a4L-ibi0T3hIfhAjeMTzorw_xQKgRNuyVlbdan58m7VafOhwS3PAsewSPdsM0MNEdty2oPiavrq9PvfS0iVoUuZus0zthPj2qGsjD1qWU-a-ZuLNwP1kwqLW2GHFJrjw/s320/ut2.png" width="232" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Transversal
podría definir una postura del Kamasutra o la trama de Rayuela, que un verano leí en Lisboa, no sé si en el orden adecuado,
y en el fondo qué más da. </b>Esa ambigüedad constituye una travesura del idioma
consagrada por quienes le dan esplendor. Porque "transversal" puede significar,
según la RAE, "que se extiende de un lado a otro", "que se aparta de la
dirección principal" y "que se cruza en sentido perpendicular" con ella. Ojalá
nunca se topen con palabra tan equívoca en un cruce de caminos o en la última
línea de una novela de intriga. Les dará la hora y acabará pidiéndoles dinero. </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Hace 20
años, cuando yo era alto y tenía el pelo negro, mi amigo Carlos Ameyugo, que
era más alto y tenía el pelo más negro que yo, solía decir que al oír la
palabra "multidisciplinar" siempre se echaba la mano a la cartera para
comprobar si seguía en su sitio. A pesar de los exagerados recelos de Carlos,
que hoy predica el español en las lejanas misiones estadounidenses, </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">aquel seductor
enfoque "multidisciplinar" fecundó nuevas y prometedoras perspectivas hasta
concebir ese tramposo pero resultón "transversal" </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">que ha conquistado innumerables
<i>Powerpoints</i> y promete pingües beneficios en los másteres de las autoescuelas de
negocio.</span></div>
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><a name='more'></a> <o:p></o:p></span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Vivimos (o sobrevivimos)
bajo un imperio de silente transversalidad, donde dos grandes potencias pueden presentarse
como aliados y alimentar bandos opuestos en una misma guerra, donde las
complejidades sociales se simplifican bajo buenas intenciones que dicen
representar el interés de esa cosa que llamamos "la gente" (ay, la gente), donde lo eterno está llamado a durar media
hora más que lo etéreo. <b>Siempre positivos, hemos teorizado - a la fuerza
ahorcan- sobre crisis que nos hacen
crecer y enfermedades que fortalecen. </b>Preferimos surfear para evitar
profundidades aunque de vez en cuando necesitemos
bucear con neopreno y sin empaparnos entre realidades virtuales, pensamientos
líquidos y religiones laicas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Todo se ha
convertido en tan imperativamente transversal que parece conveniente reforzarlo anteponiendo un prefijo que se
inicia con una sinuosa U a la palabra que arrancaba con una T como rotundo
parapeto. <b>Arquitecturas complementarias,
resistentes a los terremotos, porque transforman en flexible cualquier estructura
rígida y/o tensa. </b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Todo resbala
por esa grafía con forma de tren y cuya fama descansa sobre <b>su carácter
sugerente, novedoso y convenientemente indefinido</b>. Supone proyecto y no acto,
apetecible anzuelo para las hipótesis más seductoras. ¿A quién no le apetecería ganar como un famoso y caminar
de incógnito, ser millonario y gozar como un bohemio, sentirse maduro y por
supuesto joven? El difuso todo de lo <b><span style="color: #bf9000;">ultransversal </span></b>resumirá en adelante la suma de tantos deseos que a veces no expresamos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Así de
irresistible se presenta la etiqueta de quienes no desean etiquetarse. </b>Tanto,
que un partido que presumía de ella perdió parte de su atractivo electoral
cuando empezó a escorarse a la izquierda para sumar fuerzas. Hay que ver qué
traviesa, traicionera y hasta <span style="color: #bf9000;"><b>ultransversal</b></span> es esa cosa que llamamos "la gente" (ay, la gente). <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-80293417673291500772016-08-23T15:00:00.000+02:002016-08-23T15:00:01.112+02:00Ficcionario: Tantallas <table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgIYuideZykHKRp0fRyK4eE4uZ4oiPzLZbkEOF2fxHs9WbSGYjaQJm4gBsp0o79DeVaXS2MOu193WFtZjIGaHxIiZNxTRGzUAsuHDVnCm9XLpZheOY1WRHGJOYsXc-PsLiTrCfvR0tJrn0/s1600/aliciaespejo.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgIYuideZykHKRp0fRyK4eE4uZ4oiPzLZbkEOF2fxHs9WbSGYjaQJm4gBsp0o79DeVaXS2MOu193WFtZjIGaHxIiZNxTRGzUAsuHDVnCm9XLpZheOY1WRHGJOYsXc-PsLiTrCfvR0tJrn0/s320/aliciaespejo.jpg" width="212" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Página de "A través del espejo"<br />Ilustración: John Tenniel </td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Si la inquieta
Alicia atravesó el espejo para descubrir un universo de insospechadas sorpresas, nosotros, ejemplares
maduros de Homo Conectatus, hemos optado por edificar al otro lado de las <span style="color: #bf9000;">tantallas
</span>una incorpórea realidad a medida. </b>Tanto, que no sabemos vivir sin ella. Entre
80 veces, según un estudio de Apple, y 110, de acuerdo con un informe de
Android, activamos cada día el teléfono móvil. Siempre nos queda el consuelo de
las triquiñuelas estadísticas. Resulta tranquilizador constatar que quien esto
escribe y sus lectores somos personas moderadas que practicamos un sobrio
autocontrol. A cambio, debemos asumir que nos rodea una muchedumbre de
atolondrados. Pero, como exclamaría mi abuela Pilar, son tan buenos que hay que
quererlos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>El Homo
Conectatus se comporta como un cautivo
fijo discontinuo </b>que únicamente apaga el móvil (y no siempre) al enredarse en sus
ceremonias de apareamiento. Es la última etapa de un ritual que los jóvenes
ejemplares de la especie comienzan intercambiando los nombres en las redes
sociales, desarrollan con el envío mutuo de snaps y emojis –algunos
incomprensibles- y festejan con un sonriente selfie presencial (mejor sin palo).
“¿No tendrás un cargador para este móvil?” es la proposición que, anticipan los
antropólogos del futuro, tras una apariencia inocente puede convertir un
contacto esporádico en una relación intensa y fugaz como una Perseida. </span></div>
<a name='more'></a><o:p></o:p><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Si la cámara
del teléfono ha sustituido a la vista, su memoria (y no la nuestra) funciona
como la más eficiente garantía contra el olvido. Sin darnos cuenta,<b> nos hemos
reprogramado como registradores de sus recuerdos hasta el punto de restar
importancia a los nuestros. </b>La pasada primavera una nube de smarpthones se
elevó sobre las cabezas de los fieles para capturar ese momento, a la vez pasional
y solemne, en que la imagen de la Virgen del Rocío era sacada a hombros de su
ermita. Los velocistas de la cámara también
compiten hoy contra los fibrosos héroes del sprint. Bolt avanza hacia la
medalla de oro entre fogonazos que acreditarán el valor de quienes estuvieron allí,
aunque en el instante decisivo optaran por congelar su hazaña en píxels.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>El
idolatrado Pokemon Go sólo ha elevado a la categoría lúdica un
comportamiento habitual en los grandes
museos</b>, donde el paseo ha sido sustituido en las horas punta por una veloz
gimkana entre voraces <i>cazadores</i> de
obras de arte vigilados, qué ironía, por las cámaras de seguridad. ¿Alguien ha detenido
la vista en las obras de arte que albergan los pasillos que conducen a la
Capilla Sixtina? <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<table align="center" cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjgVuW8poDtVcsH4R7aaORRn8UsR078ITAzH3pOcLX2Reelj6x73uSnrHuBY8RNuGNiqQN3UItQs39_ekkI_RB6No1xlwHh06pjunn-0F3lKax08-afSJ-OvvXX4LwV3UzrKymiP_HUJPk/s1600/rpc.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="179" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjgVuW8poDtVcsH4R7aaORRn8UsR078ITAzH3pOcLX2Reelj6x73uSnrHuBY8RNuGNiqQN3UItQs39_ekkI_RB6No1xlwHh06pjunn-0F3lKax08-afSJ-OvvXX4LwV3UzrKymiP_HUJPk/s320/rpc.jpg" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">"La rosa púrpura de El Cairo" (Woody Allen)</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El viaje que
comenzó Alicia se complementa con<b> la genialidad inversa de Woody Allen: en “La rosa púrpura de El Cairo” hizo a un
personaje de cine cruzar la pantalla para iniciar su propia aventura en el
patio de butacas. </b>Un contraste similar al que existe entre la realidad
aumentada, que mete a los Pokemons en nuestro salón, aunque haya visitas, y la
realidad inmersiva, que desde el sillón nos sumerge en la angustia vital de los
supervivientes de Fukushima. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Si la
inquieta Alicia cruzara hoy la pantalla de su hipotético teléfono </b>quedaría
atrapada en un grupo de WhatsApp, encontraría los deberes de Mates ya resueltos,
compartiría en Instagram las fotos de EuroDisney. Vencida la primera fascinación, no tardaría en
percatarse de que apenas se topó con su vida deformada por el laberinto de
espejos cóncavos y convexos que ella mismo construyó. Regresaría rauda a este
lado, a la vez aliviada y huérfana de
universos por descubrir. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-31982532027283466402016-08-22T15:00:00.000+02:002016-08-22T15:00:08.798+02:00Ficcionario: Sostenibilidead<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh03Qf6lqrH1nirDPRdEUpYW0DM30oDRMAaYgAqMgV9o3egprn_N6VtHaWY9NepI8AZKqpUHRYd34NFmymeC7-cZoE5KbSNtUIia9zStLokzRWpba0JJ9lytorbOsvPXY51rM2Uc7EYDoY/s1600/pirro.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh03Qf6lqrH1nirDPRdEUpYW0DM30oDRMAaYgAqMgV9o3egprn_N6VtHaWY9NepI8AZKqpUHRYd34NFmymeC7-cZoE5KbSNtUIia9zStLokzRWpba0JJ9lytorbOsvPXY51rM2Uc7EYDoY/s400/pirro.jpg" width="223" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Pirro de Épiro (Foto: <a href="https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=6408153">Andrea Puggoni</a>)</td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Corría (despacio)
el año 280 antes de Cristo cuando Pirro de Epiro dejó su <i>epiroica </i>frase para Wikiquotes: “Otra victoria como ésta y estaré
vencido”. </b>Lo hizo tras la batalla de Heraclea, en la que llegó a dársele por
muerto, lo que le obligó a personarse ante sus tropas para desmentir d<i>e cuerpo
presente</i> el rumor. Este rey de un antiguo estado griego derrotó esa jornada a
los romanos lanzando contra ellos una veintena de elefantes. Pero el número de
bajas en sus propias filas fue tan elevado que, ante el temor de no poder
continuar la guerra, pronunció la juiciosa sentencia. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No hace
falta regresar del más allá para darse cuenta de que, como auguró el intuitivo
soberano, hay triunfos difíciles de sostener.<b> Un ejemplo ilustrativo lo
constituye la Wikipedia, un exitoso hito de Internet llamado a parecer por esencia insuficiente. </b>Si el mapa del Imperio sobre el que fabuló
Borges tenía el mismo tamaño que el propio Imperio, ¿es posible aprehender, ordenar
y enlazar en tiempo real todo el conocimiento que genera nuestra era? ¿Cuánto saber cabe en nuestro cerebro y cuántos
petabytes ocupará ese saber sistematizado, ordenado e indexado?</span></div>
<a name='more'></a><o:p></o:p><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El mérito de
quienes colaboran en la Wikipedia origina situaciones sorprendentes. El 11 de enero de 2008 llegó a la redacción de CNN+
en Madrid la noticia de que acababa de morir Pepín Bello, amigo y testigo de
los artistas de la generación del 27 en la Residencia de Estudiantes. Al
rebuscar en el laberinto de Google un documento fiable del que obtener algún
detalle biográfico añadido, nos apercibimos de que en la Wikipedia ya figuraba
la fecha del fallecimiento aún no difundido por los medios de comunicación.<b> Si
no fue el finado, que no parece probable, puesto que superaba los 103 años, alguien se tomó la molestia de <i>actualizar
su estado</i>. <o:p></o:p></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Anunciar la
propia muerte puede resultar desolador o civilizado, según el </b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>gusto y la
superstición de cada cual</b>. No sólo daría tiempo a testar o a </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">enmarronar</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> a seres queridos y
malqueridos, sino que permitiría borrar los perfiles de las redes sociales y </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">salvar</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> en una USB cuatro logros reseñables acumulados durante el tránsito por este valle de lágrimas. Si además
se consiguiera adjuntar una copia de nuestra carga genética quizá algún
investigador convenientemente sobornado nos concediera en el futuro una segunda
oportunidad.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Pero una
mirada filosófica revela que la inmortalidad física a gran escala se presenta en
sí misma insostenible, incluso aunque cerráramos el planeta como la Liga ACB. <b>La
otra opción, a menudo denostada, es envejecer. </b>Y para eso puede existir algún remedio. Google, (sí, Google) financia una
empresa, Calico, que a través de la investigación científica pretende, no dice
en qué plazo, posibilitar existencias más largas y sanas. Tengan paciencia, la
compañía goza de buena salud. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Una persona
hoy viva y nacida en 1917 habrá convivido en el tiempo con la Revolución Rusa,
la Segunda Guerra Mundial, la Guerra Fría, la globalización y la decadencia
occidental (¿o me estoy adelantando?). </b>Si nos trasladamos a la dimensión espacial, Javier Solana contaba
que en los 90 conoció a un anciano de la actual Eslovenia que había vivido en
cinco países diferentes sin mudarse de su casa, rodeada por fronteras de ida y
vuelta. Barajando ambas variables, tres amigos noruegos derrotaron (sin
elefantes) al cronómetro al pasar hace cuatro años por 19 países europeos en 24
frenéticas horas. <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<table cellpadding="0" cellspacing="0" class="tr-caption-container" style="float: left; margin-right: 1em; text-align: left;"><tbody>
<tr><td style="text-align: center;"><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZ2fq1hBZhF8wCM4PGtWa2Mrx5dGyLPGPnQWle1w76Za0QJePkMYZ9pw4hcaFHE5WsrEBTNNrRU-8O8RQOMDPPQxuTkmmp6nn5dhMVg_T5P-Pd5hZ-jsdp0Qbz9oyKFsWH1X45TOT4HfA/s1600/19countries.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; margin-bottom: 1em; margin-left: auto; margin-right: auto;"><img border="0" height="143" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhZ2fq1hBZhF8wCM4PGtWa2Mrx5dGyLPGPnQWle1w76Za0QJePkMYZ9pw4hcaFHE5WsrEBTNNrRU-8O8RQOMDPPQxuTkmmp6nn5dhMVg_T5P-Pd5hZ-jsdp0Qbz9oyKFsWH1X45TOT4HfA/s320/19countries.jpg" width="320" /></a></td></tr>
<tr><td class="tr-caption" style="text-align: center;">Imágenes compartidas por <a href="http://www.garfors.com/2014/09/19-countries-in-one-day-see-how.html">Gunnar Garfors</a></td></tr>
</tbody></table>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Ese viaje
fatigoso, fatuo y de elevada huella energética supuso una pequeña venganza
contra el reloj, pero sería impensable un duelo similar contra la paciencia del
calendario</b> que cada día siega vidas, altera atlas, sepulta Imperios. La
única sostenibilidad a medio plazo se basa en quedarse quieto o, en definitiva,
muerto. ¿Quién se acuerda hoy del pequeño estado de Épiro? <o:p></o:p></span>¿Quién se acuerda hoy del pequeño estado de Épiro? No pasó inadvertido en su época pero tanta gloria, casi como cualquier vida, a largo plazo no ha sido más que pírrica. </div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-57848398907571240892016-08-21T15:00:00.000+02:002016-08-21T15:00:08.612+02:00Ficcionario: Religerancia <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiB2eiJZxfc9kFm13Cw41W6AttV11oSwdvgWeHckF-JEXEl3vWQIV6MVbOsN3IqXBc0A3P1VKGZIjNljLJHIFvVwW_ka6J1kh2UbQfJWPmCBjYFgCdjs145BwvAMKa-jzKM8YGCxa-UMvY/s1600/religerancia.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="281" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiB2eiJZxfc9kFm13Cw41W6AttV11oSwdvgWeHckF-JEXEl3vWQIV6MVbOsN3IqXBc0A3P1VKGZIjNljLJHIFvVwW_ka6J1kh2UbQfJWPmCBjYFgCdjs145BwvAMKa-jzKM8YGCxa-UMvY/s320/religerancia.png" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Empecemos
por lo humano.<b> Hace falta ser malnacido para secuestrar en nombre de la
religión a un octogenario, obligarle a arrodillarse ante el símbolo de su fe y
degollarlo mientras se graba la humillación en vídeo. </b>Hace falta ser malnacido
para arrollar con un camión a una multitud indefensa, hace falta ser malnacido
para llenar de bombas unos trenes abarrotados de gente. Semejantes carnicerías no
acreditan ser un buen musulmán (ni cristiano, pero no es el caso) ni un
eficiente yihadista, sino apenas un malnacido. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Catorce
siglos y medio después del nacimiento de Mahoma, más de 700 años después de la
última cruzada medieval, algunos iluminados han decidido lanzar a sus hermanos
más pobres e ignorantes a una guerra de religiones. <b>Y no, no se trata de un
conflicto por creencias; nadie les impide profesar la suya en sus países de
origen, ni siquiera en los de acogida.</b> Tampoco asistimos en rigor a una lucha
entre civilizaciones pese a que coincida en el tiempo con un desplazamiento
masivo de refugiados musulmanes hacia las sociedades laicas de Europa
Occidental. </span></div>
<a name='more'></a> <o:p></o:p><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Aunque no se
trate de una guerra de religiones, sí existe un componente religioso. No todos
los credos aceptan el mismo grado de inserción en las sociedades secularizadas
y multiculturales del siglo XXI. <b>Mientras los movimientos extremistas del
cristianismo van quedando relegados a posiciones marginales, el Islam más
moderado se muestra incapaz de contener la deriva terrorista de las corrientes radicales.</b>
Las disputas sobre el IBI de las propiedades eclesiásticas, el aborto o el
concordato, aun siendo simbólicas, representan cuestiones insignificantes junto
a la gravedad de los atentados terroristas.
<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Y aunque no
se trate de una lucha de civilizaciones, también incluye alguno de sus
elementos. Frente a unas sociedades que han adoptado la democracia como forma
de gobierno y han vivido décadas de prosperidad económica, otras que todavía <b>oscilan entre la teocracia y la dictadura, con una relevante
proporción de sus integrantes en niveles de vida cercanos a la pobreza. </b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Pero todas esas
ventajas comparativas de nuestra Europa de raíces cristianas no emanan de la religión. Al contrario, se levantan a partir de un desafío a su supremacía.
</b>El espíritu ilustrado del siglo XVIII emancipó a las sociedades occidentales de
las creencias, envió a los dioses desde el centro de la escena pública al
ámbito de lo privado, diferenció los derechos humanos de las disposiciones
divinas, empezó a establecer la primacía de las leyes sobre los mandamientos,
de los delitos sobre los pecados. Creó un marco que permite la convivencia,
incluso con tensiones, entre la fe y la razón. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Ese tránsito, por contraste, aún no se ha producido de forma mayoritaria y consciente en las
sociedades musulmanas. <b>Ese tránsito, del que las primaveras fueron un breve e
imparable prólogo, se presenta a la fuerza traumático. </b>Tendrá que doblegar las
raíces de la desigualdad social interna. Generará guerras y refugiados, que no
son terroristas sino una figura reconocida y reglamentada en el Derecho
Internacional. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Nuestras
sociedades hacen frente al terrorismo islamista en inferioridad de condiciones,
pero cualquier tentación de llamar a la guerra, de suspender la ley, no supone otra
cosa que dar marcha atrás, encumbrar valores ya superados, transformarnos en los locos fanáticos que nos atacan. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Acabemos por
lo divino. <b>Las religiones mejoran el espíritu, nos animan a ser más que un
trozo de carne y una cuenta corriente, pueden enriquecernos como personas si
las elegimos con libertad y las practicamos con respeto a quienes no las
comparten. </b>Pero son tremendamente dañinas cuando adquieren la hegemonía pública
hasta imponer el orden político y social. Dejemos los dioses pasionales e iracundos para la literatura clásica.<b> </b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Si una mañana ofuscada su dios le
pide que mate a alguien, abandone a su dios, rece menos y lea más. </b>Si es usted
quien insiste en matar en nombre de su dios, no lo use como excusa. Ofrézcale
su vida y suicídese de inmediato. En solitario. Sin dañar a nadie. No faltará
quien rece por su salvación. Es humano. </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-42451187357086451022016-08-20T15:00:00.000+02:002016-08-20T15:00:13.645+02:00Ficcionario: Quinihilistoico <div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Pocas veces
vi tan irritado a mi tío-abuelo Eustaquio.</b> Es verdad que antes de rendirse a la
indolencia de la vejez había comenzado con frecuencia a quejarse, con más
sorpresa que enojo, sobre las vicisitudes de una España que dejó de comprender
a medida que cumplía años, y ya superaba
de largo los 70. Esa tarde me recibió de nuevo con los andares oscilantes, enfundado
en un batín que no disimulaba sus pantalones gastados y unos zapatos antaño
lustrosos pero ya disparejos. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Eustaquio
Domínguez era una persona con cultura. Leía libros avanzados para su época y como
marino había viajado al extranjero en la época de Franco, cuando pocos lo
hacían. Disfrutaba su vida hasta que un
atropello brutal le rompió más huesos de los que albergaba y quedó confinado
entre las cuatro esquinas de una casa compartida con su hermana Pilar en
Valladolid. Allí recordaba la época dorada que vivió en Madrid, las visitas vespertinas
al casino militar de la Gran Vía, tantos partidos en el Bernabéu y en el
Calderón. <b>“Qué-pron-to-se-pa-sa-to-do”, suspiraba de manera indefectible al
apurar un café, acompañando cada silaba sobre
la fugacidad con el tamborileo de sus dedos huesudos sobre una diáspora de
migas. </b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b><br /></b></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHCGVDE2hoSFeJ450wHWttifaoZsiTt3GxuKbEp8tv8T5T7yG2KNlo06F5XnrLIn_78tG3lg6-pN6mq9PG0v-SAjutta-t2Ez8Z_i2zuc6fxPFS1FPWvxQOUOqyNhpFH4EPJlYtCQjyL0/s1600/quiniela.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="242" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHCGVDE2hoSFeJ450wHWttifaoZsiTt3GxuKbEp8tv8T5T7yG2KNlo06F5XnrLIn_78tG3lg6-pN6mq9PG0v-SAjutta-t2Ez8Z_i2zuc6fxPFS1FPWvxQOUOqyNhpFH4EPJlYtCQjyL0/s320/quiniela.jpg" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Pero aquel
domingo, charlando de fútbol, movió una mano sin emoción. "<b>Acerté la quiniela"</b>.
La forma de anunciarlo no invitaba a darle la enhorabuena. "Acerté la quiniela,
pero fíjate, mi hermana Pilar olvidó el sellar el boleto …" </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Ella, menuda y siempre sonriente, apareció en
el umbral para corroborar la buena nueva. "Se me olvidó en la cartera". En el
salón<i> amenazaba tormenta.</i> Eustaquio alzó la voz. "<b>¡Gané la quiniela y un
periodista estúpido, ¿tú te crees?, dijo en la radio que había un único
acertante de catorce, un señor de Sabadell,</b> cuando yo tengo otro boleto sin
fallos en la cartera…! ¡Tráelo, tráelo!" </span><br />
<a name='more'></a><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">No quise
contemplar la reliquia y, sin valor para reírme, intenté cambiar de
conversación. Mi tío volvió a la carga, todavía guardaba un as. </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">"Lo que ese
periodista no sabe es que no pasa nada porque conservo el boleto y voy a
repetir los signos en la segunda vuelta".</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> Pilar, comprensiva y cómplice,
asintió de nuevo, muy orgullosa de su importante papel en el próximo e irremisible
aumento del patrimonio familiar. </span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">La siguiente
visita preferí no preguntar. Porque aquella no fue la única ocasión en que el
inolvidable Eustaquio, según su testimonio, coqueteó con la fama y la fortuna.
</span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Hasta media docena de veces me contó que había sido el inventor del lema "España
es diferente". </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Las primeras fueron, lo admito, motivo de incrédulas risas
familiares. Pero un día me enseñó LA CARTA. Estaba dirigida a Manuel Fraga, y
en ella le explicaba cómo en los años 60, cuando el aludido era ministro de
Turismo, mi tío-abuelo había participado en un concurso de ideas para promocionar España. "Luego empecé a
escuchar la frasecita por todos los sitios y nunca me pagaron nada". La
reclamación parecía un poco tardía; cuarto de siglo, año arriba o abajo. Y
así se lo argumentó a vuelta de correo el político, que por entonces era
presidente de la Xunta de Galicia. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Mi tío murió
en una residencia hace seis años, después de haber doblado con su frágil figura el cabo de los 90.
Fraga falleció en 2012 y nunca indagué, gravísimo error, sobre la feliz existencia
del señor de Sabadell y la tragedia del periodista desinformado. <b>Ignoro dónde
acabó aquel boleto ga-na-dor-pe-ro-no-pre-mia-do. Sí, qué pronto se pasa todo. </b>Hoy
España es un país como tantos otros. Por el contrario, Eustaquio, primero <span style="color: #bf9000;"><b>quinielisto</b></span>,
luego<b> <span style="color: #bf9000;">quiniestoico </span></b>y siempre<b> <span style="color: #bf9000;">quinihilista</span></b>, era en verdad <i>triferente</i>. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-68321110153581909652016-08-19T15:00:00.000+02:002016-08-19T15:00:01.294+02:00Ficcionario: Prexigente<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWhNdGjdQlAhIF-dS92Yt1qkOJBMyFCrl6Ij36VUDGNvslAq32z0PH3r02awMh9iPqsfiZhfEkjSbHEcBtnzp-HTVQjb4kZXdN9-wK4I7Ld0hmIqWxHwj2o6HLgH3HbAZf4HdVvge35ts/s1600/balondefutbol.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="193" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjWhNdGjdQlAhIF-dS92Yt1qkOJBMyFCrl6Ij36VUDGNvslAq32z0PH3r02awMh9iPqsfiZhfEkjSbHEcBtnzp-HTVQjb4kZXdN9-wK4I7Ld0hmIqWxHwj2o6HLgH3HbAZf4HdVvge35ts/s200/balondefutbol.jpg" width="200" /></a><span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>"Este hombre
al que me honro hoy en presentar contribuirá a hacer aún más grande la ya
gloriosa leyenda de nuestro club".</b> El presidente repitió su frase favorita, la
misma que había utilizado al dar la bienvenida, durante la temporada anterior,
a otros siete fichajes de calidad contrastada y llamados a marcar la diferencia
con los rivales. Como entonces, nadie se atrevió a carraspear. Los directivos,
conscientes de la importancia del instante, que les había obligado a adelantar
el final de sus vacaciones. Los periodistas, tan acostumbrados a oírla que no
repararon en ella. Los jugadores, algo
incómodos. Y el público, porque ya no podía disimular su ansiedad por ver al
astro en acción. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>"Este hombre, repito, ha renunciado a mucho por estar aquí con nosotros, se lo reconozco y agradezco
públicamente".</b> Sonó una palmada sin eco. El aludido sonrió, entornó los
párpados, inclinó la cabeza sin mover un pelo. Le hubiera gustado, por un
heredado sentido de la educación, fingir algo de modestia, pero el brillo ambicioso de
los ojos traicionó el gesto. <b>Una salva de aplausos desorganizados desvió a
córner la incomodidad del empleado que había quedado en fuera de
juego. </b></span></div>
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"></span><br />
<a name='more'></a><br /><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b> "En los últimos años hemos realizado un gran
esfuerzo por reunir a los mejores del mundo".</b> Podía sonar pretencioso, pero
resultaba irrebatible. El guardameta revelación del último Mundial, un central
que era un muro, ese medio centro que marcaba el ritmo (en las discotecas), el
veterano escudero que aportaba carácter, tres goleadores procedentes de los
grandes rivales. <b>Sin duda, el club estaba viviendo una época… de plata. Porque
siempre faltaba un escalón.</b> Uno solo, pequeñito, pero uno. Y la próxima
temporada había elecciones. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>"No oculto
que debemos hacer autocrítica". </b>La palabra sonaba tan desacostumbrada en sus
labios que hasta un becario abrió los ojos."<b>Hay que decirlo: quizá me haya
equivocado"</b>. Los informadores comenzaron a calibrar un encabezamiento
alternativo para la crónica imaginada de antemano. "Por eso he tomado una
decisión tan difícil". Los directivos contuvieron la respiración. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>"Siento que hemos traicionado las raíces de una institución
centenaria". </b>Un periodista veterano se retrasó unos pasos con el teléfono ya
pegado al rostro para ser el primero en ... El resto tecleaba de forma frenética sobre las
tablets. <b>"Es necesario regresar a los orígenes, retomar y poner al día ese
estilo que nos hizo reconocibles, que tantas veces nos convirtió en
campeones. Y para eso contamos contigo,
muchas gracias de nuevo por unirte a nuestro club".</b> Falsa alarma. Bienvenida y
no adiós. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No hubo blablablá.
<b>El crack pasó a la acción entre el entusiasmo, ahora sí evidente, de los niños que acompañaban la camiseta oficial con crestas mohicanas.</b> En apenas minuto y medio despachó al capitán, que se levantó con el pelo cortado a cepillo, remojadito, y una raya a la derecha más recta que la línea del fuera de juego. Mientras
el artista dudaba si acometer a maquinilla o a navaja las greñas del lateral derecho, el presidente calculaba sin despeinarse los
beneficios económicos de la nueva política estética del club, erguido por la
severidad y satisfacción de quien se siente una persona de principios. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-63091493641888558032016-08-18T15:00:00.000+02:002016-08-19T16:51:29.604+02:00Ficcionario: Ochentosaurios <div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Cabalgamos los 80 sobre aquellas bicicletas irrompibles que lanzábamos cuesta abajo, esquivando
las piedras para no salir volando entre carcajadas. </b>Competimos con una rueda
pinchada, quedamos “donde siempre” a medianoche,
reímos sin miedo. Aquello era un verano; sírvame todo “con”, o mejor quite sólo
las responsabilidades. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIJlNWdoqqWtWc473fvoH0y7e2M475Hb6bZlAtRRu7IUvXa_RD7kmA9tcpTWGrvMoOvqXPeAWJQiSLk6-nLKBc-zlxO_Wg8bWnMZpSkoZd9pCzknzhqSQGoPj1FZoLl_8WcJ8QcJUJnXc/s1600/logo800.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="157" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjIJlNWdoqqWtWc473fvoH0y7e2M475Hb6bZlAtRRu7IUvXa_RD7kmA9tcpTWGrvMoOvqXPeAWJQiSLk6-nLKBc-zlxO_Wg8bWnMZpSkoZd9pCzknzhqSQGoPj1FZoLl_8WcJ8QcJUJnXc/s320/logo800.png" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Al ritmo del
radiocassette, lo llevábamos por turnos, <b>llegamos a creer que la Luna era
nuestra y estaba ahí para conquistarla bailando</b>, como Michael Jackson. Mientras
él se deslizaba, ingrávido, marcha atrás, entre decenas de zombies, Maradona
avanzaba en zigzag ajusticiando a doble velocidad a cada inglés que salía a su
paso. <b>Vida-videojuego. </b>"¿Me da monedas para llamar desde la cabina?". Matábamos <i>marcianitos</i> hasta que no
sentíamos las piernas, ni siquiera eso iba a detenernos.</span></div>
<a name='more'></a><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Bebimos
mezclas imposibles, alcoholes de colores, el gusto pegajoso de la lima.</b> Desayunamos -otro día más- sin habernos
acostado, en el enésimo esfuerzo condenado a ser tan baldío como los recuerdos.
Comenzaba el furor por las zapatillas de la NBA, fumar estaba de moda y aún no
había nacido esta agotadora nostalgia <i>viejuna </i>por la EGB.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El mapamundi
se dividía entre el lado oscuro y el nuestro. <b>Viajábamos poco y poco nos importaba
aún lo desconocido. </b>Años también de
plomo, de asesinatos con falsas excusas. Los veranos azules de un país en
reconversión. La selección española nunca defraudaba: empezaba como favorita y siempre
perdía. Pero todavía no estaba mal visto echar la culpa al árbitro o, de nuevo, a la mala suerte. El fin del mundo quedaba tan a desmano que de toda la década apenas recordamos un grito
–“¡el milienarismo, el milienarismo!”- en un plató de televisión. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Un día leímos que aquel Reagan, vaquero de reparto en caducos westerns, estaba ganando la guerra de las galaxias a la
Unión Soviética. <b>No le dimos importancia; tampoco parecía simpático el peinado
de la Thatcher. </b>Entre administraciones y carreteras, crecían como billetes
verdes los nuevos ricos en la España de Felipe. Europa era eso que suponíamos
la modernidad. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">De fiesta en
fiesta, preferimos no entender la amargura de Sabina ni la agonía de Antonio Vega. Hasta que bajo la verja del garito se filtró una rendija de luz de los
90. No se trataba de efectos especiales. Había caído el “muro”. Fieles al
espíritu de la década, decidimos atrincherarnos hasta agotar las
existencias. </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">Hoy los 80 vagan por Internet, perdida toda esperanza de que
se reconozca su derecho al olvido. </b>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-20676635726046051172016-08-17T15:00:00.000+02:002016-08-17T15:00:03.090+02:00Ficcionario: Ñacionalismos<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>El
nacionalista catalán Francesc Homs presentó el martes 19 de julio su
candidatura a presidir el Congreso de los Diputados.</b> Fue descartado en la
primera ronda y los votos de su partido se utilizaron luego para apoyar a
candidatos del PP a la Mesa de la Cámara. Más simbólicos que su previsible
fracaso fueron sus deseos de tener un grupo parlamentario propio sin cumplir
todos los requisitos y el momento elegido, una semana después de que el Tribunal
Supremo le citara como investigado por organizar en Cataluña una consulta soberanista
contra España. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Del sentido al sinsentido pasando por el mercadeo transita desde
hace años el nacionalismo catalán. </b>Pisa moqueta, reclama financiación y
administra instituciones por la mañana. Se echa a la calle disfrazado de romántico
revolucionario, despeinado con dos deditos, por la tarde. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Como tantos
siglos debatiendo ensimismados sobre el ser, las esencias y las encrucijadas
históricas dejan huella, o al menos se hacen plomizos, nuestros <span style="color: #bf9000;"><b>ñacionalismos</b> </span>guardan en el ADN una obsesión con
el pasado que lastra el presente. <b>Para desgracia de todos, nada hay más español
que gastar tantas energías inútiles en descubrir qué es para luego pretender no
serlo. </b>Papa e hijos, qué sorpresa, a veces se parecen. Son <i>agrandaos</i>, abusan de las grandes palabras (“libertad”, “democracia”,
“derecho a decidir”…) y, en vez de elevar el listón ético, muestran una acusada
tendencia a mezclar poder y negocio. </span></div>
<a name='more'></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">Si bien cada
uno puede sentirse de donde quiera -y mezclar y cambiar a su gusto- el deseo de
imponer proyectos colectivos basados sólo en esos sentimientos ha causado
demasiado dolor en esta España con tara pero sin duda democrática. </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">Miles de
valerosos luchadores por la independencia vasca se han hartado durante décadas
de chantajear, secuestrar y matar a quienes identificaban como distintos.</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;"> Intentaron
convencernos de que el tiro en la nuca y el coche bomba eran consecuencias de
un "conflicto" que en realidad había muerto con Franco. Desde hace un lustro,
vencidos y además deslegitimados, reclaman amnistías sin arrepentimiento ni
justicia mientras intentan falsear el relato de una paz que sobre todo ellos tiñeron
de sangre.</span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Nuestros
<b><span style="color: #bf9000;">ñacionalismos </span></b>periféricos eclosionaron aprovechando el desprestigio de lo español, impuesto y manoseado por la dictadura, pero han engordado con los
entendimientos de la democracia y, en el caso catalán, ha estallado desde la
recesión. <b>Basado sobre irresistibles emociones, tiene la corriente a favor
hasta que los hechos las desmientan.</b> Un fantasma recorre Europa, y no es el
comunismo que en 1848 describieron Marx y Engels. Un fantasma que hace parada y
fonda en las sociedades angustiadas por el futuro. </span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Como a Homs,
a todos nos gustaría proteger nuestra identidad –sea lo que sea eso: un
derecho, una patria, una bandera- pero seguir recibiendo cada vez más dinero europeo.
A todos nos incomoda compartir y ceder parte de esos fondos, especialmente a
quienes sentimos diferentes. </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Identidad, diferentes, riqueza, miedo.</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">
Sentimientos humanos, incluso comprensibles hasta que algunos desaprensivos los
transforman en ideología para agrandar o proteger sus privilegios. </span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-19183383294214470402016-08-16T14:56:00.000+02:002016-08-16T14:56:13.529+02:00Ficcionario: Nostureo<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUnOaP9HJ1HEhdyEUysJu7Os1yCul6GJ2rUS4VAo0LuCI-hQKru6K6xUqNOF_muY25gnEFBFX1gbY_HuaMqB7pVXzqAl0IJfgYRRF_4whWU-AwDOmE4Sd7y3Ci-HXCsdWICm6ZNmz6C3g/s1600/punepolice.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUnOaP9HJ1HEhdyEUysJu7Os1yCul6GJ2rUS4VAo0LuCI-hQKru6K6xUqNOF_muY25gnEFBFX1gbY_HuaMqB7pVXzqAl0IJfgYRRF_4whWU-AwDOmE4Sd7y3Ci-HXCsdWICm6ZNmz6C3g/s320/punepolice.png" width="268" /></a><span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Dinesh y
Tarakeshwari Rathod hicieron cumbre hace unos meses en la onanística práctica
del <i>postureo.</i></b><i> </i>En una rueda de Prensa organizada el 6 de junio en Katmandú aseguraron
ser la primera pareja india que había coronado el Everest. Como si el punto
más alto de la Tierra no fuera por temporadas una atascada autopista hacia el
cielo, como si con tanta gente y el fresquito resultara complicado arrejuntarse
allí arriba. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">170 personas
llegaron a la cima el 23 de mayo de 2010, el día más concurrido de su heroica
historia; más de 70 de nacionalidad india lo habían conseguido esta misma
temporada antes que ellos. Probablemente Dinesh y Tarakeshwari <b>no buscaban
tanto la soledad como un reconocimiento global de su <i>menage a trois</i> con la
aventura. </b> Ya en años anteriores habían presumido del ascenso al pico más alto de
Australia y de sus especiales habilidades en el <i>skydiving</i>. Parece que tienen otras. </span></div>
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><a name='more'></a><o:p></o:p></span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">No contentos
con haber demostrado maestría en la escalada, <b>ahora aspiran a su pesar a un
diploma en el manejo profesional del Photoshop.</b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b> </b> O</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">tros nueve montañeros denunciaron que, según sus vestimentas, el
ángulo que forman las sombras y el tiempo que hacía el día de autos, 23 de mayo,
es muy probable que tomaran sus fotos en el campo-base y las superpusieran
sobre imágenes ajenas del techo del mundo. Ole, ole y ole.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Esta pareja
de policías –porque también trabajan juntos- ha invertido el popular viaje que
protagonizó un enanito de jardín en la película "Amelie". <b>En la era de las
redes sociales, los Rathod no van a la
montaña; es la montaña la que va a ellos. </b>No dan la vuelta al mundo. Al
contrario, el mundo debería girar en torno a esa relación capaz de superar cualquier
obstáculo. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Si, como
parece, finalmente se quedan sin Everest, <b>Dinesh y Tarakeshwari se habrán
consagrado como profetas del </b><span style="background-color: white; color: #bf9000;">nostureo</span><b>:</b> compartir fotos de lugares donde no
hemos estado. Playas paradisiacas, atardeceres con mensaje y gintonics con
bastante más vegetación que Los Monegros añaden un filtro socialmente admitido
de interés a nuestras vidas. Pero apenas suponen una menudencia para los
Rathod, que <b>llegaron a recibir la felicitación del jefe de Policía de Pune.</b> "Habéis llevado a
este departamento a nuevas alturas", publicó
henchido de orgullo en la página corporativa de Facebook. "O más bien a nuevas
profundidades", ha puntualizado después un malévolo seguidor. <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A una letra,
a una sola y minúscula letra se limita la casi imperceptible diferencia entre impostar e impostor, entre <i>postureo </i>y<span style="color: #bf9000;"> nostureo</span>. <b>A los Rathod, pese a
todo, les redime su amor. </b>Confesaron que, una vez conquistado el Everest,
buscarán la felicidad personal de tener un hijo. Aguardamos las fotos con
auténtica y mal contenida ansiedad. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-84751144491991912462016-08-15T15:00:00.000+02:002016-08-15T15:00:05.278+02:00Ficcionario: Mantramientos<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Según las
tradiciones judía y católica, <b>dos veces, dos, tuvo que escribir Dios, que esa
tarde estaba de buenas, las Tablas de la Ley a Moisés.</b> Semejante esfuerzo no
fue en vano: sus mandamientos se han desobedecido durante siglos. </span><br />
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAWG8nCK6MlioVIsGHwumXNMNe-C2OGxpjRuOojApXzwGRCRyTMHErEernKbTUmdSvw4CovyT7Tt6it69yUjqouNTOMFViTNwWZ3fIzvpxik1K0jSBlPNGfggdiWBFROJeWZo0m9QRGrY/s1600/mantramientos.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="178" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjAWG8nCK6MlioVIsGHwumXNMNe-C2OGxpjRuOojApXzwGRCRyTMHErEernKbTUmdSvw4CovyT7Tt6it69yUjqouNTOMFViTNwWZ3fIzvpxik1K0jSBlPNGfggdiWBFROJeWZo0m9QRGrY/s200/mantramientos.png" width="200" /></a><span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Si hoy
preguntáramos al<span style="color: #bf9000;"> <b><a href="http://agostodebajocoste.blogspot.com.es/2016/07/ficcionario-agostupefacto-algorismo.html">algorismo</a></b> </span>rampante (que reina pero no gobierna), nos despacharía
con una lista breve de 5 <i>tips</i> copiados de Internet. ¿Carece de solemnidad? Da
igual, <b>a base de compartirla y repetirla se convertirá en verdad revelada.</b> Palabra
de gurú. Con el calor del verano y la edad, los dioses terrenales se han hecho más vagos,
<i>googlean</i> o han aprendido a delegar. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>-Sea
proactivo</b>. Tome la iniciativa. ¿Cuál? No importa. Sólo tiene que parecer diferente,
aunque resulte disparatada. Haga cosas, por Dios, haga y haga. ¿Ha oído hablar
del éxito de IKEA? Pués hágalo usted mismo. ¿Son suecos y no entiende? Consulte
a <b>Google Translate</b>. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"></span></div>
<a name='more'></a><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">-Sea
colaborativo.</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;"> Una vez discurrida la ocurrencia, invite a los demás a
participar. Se convertirá en un líder visionario en caso de éxito o podrá
dividir responsabilidades si, todo puede pasar, fracasa. Muestre interés
–inexistente- por alguna sugerencia ajena y admita que "su implementación se
encuentra en fase de estudio". ¿No suena irresistible? De ese modo irá
ampliando sus círculos de influencia. ¿Qué círculos? ¿No ha probado todavía
</span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">Google Plus</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">?</span><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>-Sea emocional.</b>
Regale frases inspiradoras. ¿No conoce ninguna? Puede tomarlas prestadas de
Facebook. Reparta optimismo, eso cotiza al alza ante los jefes, que nunca se
plantearán echarle a la calle. ¿A qué calle? Busque en <b>Google Street View</b>.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>-Sea visual,</b> no necesariamente sincero. Aporte cordilleras
de gráficos procedentes de experiencias ajenas imposibles de comprobar. Cuela
seguro. Si consigue deslizar, sin un
compromiso explícito, los términos "convertir" o, mejor aún, "monetizar", le harán la ola. ¿Dónde están las mejores
olas? Eche un vistazo a<b> Google Maps.</b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>-Sea pedigüeño,</b>
incluso un poco llorón. Pida siempre más medios. ¿No se los dan? Por fin se
acabó su problema, se extinguió su responsabilidad y pronto su liderazgo se
convertirá en tendencia. Compruébelo en tiempo real en <b>Google Trends</b>.</span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>En cuanto a
lo de no matar, no robar, la mujer del prójimo y otras menudencias</b>, ya están
reguladas con desigual fortuna en el confesionario y en el Código Penal. Si a
usted le da por recorrer el camino del mal, procure que su empeño sea
proactivo, colaborativo, emocional, visual y un poquito llorón. Puesto que
acabará sus días en el infierno (y probablemente en la cárcel), quizá logre gozar
antes de sus quince minutitos de gloria en Internet. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-29941098680146406502016-08-14T15:00:00.000+02:002016-08-14T15:00:30.539+02:00Ficcionario: Llenajenada<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">El nuestro
fue un amor de circunstancias.<b> Nos presentó una amiga común, presintió que
encajaríamos bien. </b>Comenzamos a salir juntas por costumbre, hasta que las
llamaradas de tantas afinidades nos hicieron inseparables. En 1803 nos casó la
RAE y quedamos instaladas en la decimocuarta estancia de su diccionario.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgB7v_28jKzNQBtvcv5a1-tcCRhHTXOi0Xdnhzl0fJcp2N3DH_tXWP_oPHY3BXD9MBKCnlp6gJAzgjWym1wzqlLXOsY9JRRiAHjVPmpLj5uIsvHwaO-YAyl3hkFalJ2A4e7Wwh-YGa-sJ0/s1600/ll.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="101" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgB7v_28jKzNQBtvcv5a1-tcCRhHTXOi0Xdnhzl0fJcp2N3DH_tXWP_oPHY3BXD9MBKCnlp6gJAzgjWym1wzqlLXOsY9JRRiAHjVPmpLj5uIsvHwaO-YAyl3hkFalJ2A4e7Wwh-YGa-sJ0/s200/ll.png" width="200" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Quisimos
formar una <i>famillia felliz</i>, tuvimos
no sin dificultades una parejita de vocales gemelas. </b>Procuramos que cada una se
sintiera única y distinta. Porque no supimos educarlas o porque así son las
letras de ahora, debieron sentir que nos separaban y se marcharon, cada una por
su lado, a fundar sus propias sílabas. Cómo me apena que apenas se llamen para
felicitarse las Navidades. Y allí nos quedamos nosotras, solas de nuevo,
aburridas y condenadas a envejecer en compañía por miedo al "qué dirán"</span></div>
<a name='more'></a><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Si al menos
hubiéramos sido suecas, podríamos, orgullosas, haber formado parte del nombre
de una estantería de Ikea. Pero, atrapadas en el castellano, en mi corazón fueron
creciendo el aburrimiento, la tristeza y, por qué no admitirlo, la envidia.
Nunca entendí por qué ella siempre tenía que ir delante, por qué ella y siempre
ella se vestía de fiesta cuando salíamos al inicio de una frase.<b> Nunca fuimos
libres ni mucho menos iguales. Tanto rencor cada vez me escocía más. </b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Una mañana
de febrero me planté. "<b>Hasta aquí hemos llegado", le espeté <i>lloribunda</i> y <span style="color: #b45f06;">llenajenada</span>.
</b>Cuando pedí el divorcio, reaccionó con altivez. "Ni siquiera sabes valerte por
ti misma". Traté de explicarle mi malestar, intentó justificarse. "Llegué
primera, eso es todo". No me convenció. <b>"Seré una l liviana, locuela y libre"</b>. "Y prescindible", apostilló con llamativo desprecio. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Llovía a
cántaros cuando, tras arrojarle las llaves, abandoné el hogar llevándome los
discos de Pimpinela. <b>Vagué por algunos cuentos infantiles, me perdí entre
fábulas, dormí acurrucada en un poemario de Gloria Fuertes.</b> Hice amistades con
alguna i descarriada, pero debido a mi mala experiencia como madre, renuncié a
establecer relaciones duraderas con vocales. (Suelen tener demasiado afán de
protagonismo). <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Una tarde
encontré a una t elegante, distinguida y atractiva.</b> Me sedujo rascándome la espalda,
contamos estrellas y acabamos practicando el sexo tántrico bajo la camisa de
una novela de aventuras. Con el tiempo descubrí que era como tantas. Si yo
quería salir, ella prefería descansar. Dormía al amanecer, justo cuando yo me
levantaba. Incompatibilidad de caracteres. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Nos
separamos sin reproches ni traumas. <b>Al cuarto de hora, cuando caminaba por una
carretera, me llamaron desde un coche. "¿Te llevo?"</b> Aquella c me conquistó por
su corazón. Nos compenetramos bien. Bebemos alcohol clandestino, bailamos en un
club de alcurnia y, aunque es un poco alcahueta, nunca me la ha <i>clavado</i>. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-41023231132385729992016-08-13T15:00:00.000+02:002016-08-13T15:00:07.296+02:00Ficcionario: Lunternet<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>El 20 de
julio de 1969 el hombre pisó la Luna.
</b>Casi una década antes, en torno a 1960, había arrancado la cadena de
innovaciones que hacia 1990 hicieron posible la creación de Internet, el
insondable satélite artificial de la Tierra. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2EYwsjykpygRyEqZvRCFgg9VHeuZgjVbBqFztJ7MH3dpVsdYdRCyBP5lj5FnaG48LhzlMEL1tS8kzooeQlTsLdBgmeB4y1hxyU7J0kkLoZEZySzNlqTVeiwh0_6grBJfyeKz2SMeGvW4/s1600/lunternet.jpg" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="188" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg2EYwsjykpygRyEqZvRCFgg9VHeuZgjVbBqFztJ7MH3dpVsdYdRCyBP5lj5FnaG48LhzlMEL1tS8kzooeQlTsLdBgmeB4y1hxyU7J0kkLoZEZySzNlqTVeiwh0_6grBJfyeKz2SMeGvW4/s200/lunternet.jpg" width="200" /></a><span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Aquella luna mantiene hoy su fascinación virginal. En paralelo, Internet crece, evoluciona y se extiende envolviendo nuestro
planeta desde los fondos oceánicos hasta <i>la
nube</i>. Permite la libertad de movimientos de capital, fomenta la de
mercancías y tolera, con limitaciones, la de personas. No impone cupos a
inmigrantes. Defiende con entusiasmo juvenil la igualdad de oportunidades, con
la ilusa esperanza de que <b>un graffitero visionario coloree para la efímera
posteridad de su Snapchat a la neutralidad en la Red guiando al pueblo. </b></span></div>
<a name='more'></a><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Apuntan los
apocalípticos (y en particular los aficionados del Atlético de Madrid) que
Internet nunca podrá hacer crecer lechugas de un </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">smartphone</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">. Rebaten los integrados que localizará las semillas más
baratas, compartirá las experiencias para una plantación eficiente, activará el
riego a distancia y podrá venderlas en cualquier lugar del planeta. "Cañones o
mantequilla" se planteó Lenin hace casi un siglo.<b> "Arroz transgénico o coltán
para los </b></span><b><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">smartphones"</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> sería la
disyuntiva </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">reseteada</i></b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b> por la
actualidad.</b> Porque las </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">apps</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> aún no se
comen, aunque contribuyan a entretener el hambre. </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Si el número
de habitantes del planeta sobrepasa actualmente los 7.000 millones de personas, más de la
mitad poseen ya acceso a la Red. La diferencia entre ambas cifras tiende a
reducirse en términos exponenciales al mismo ritmo que aumenta la interacción
entre el ecosistema físico y el digital. En seis días de julio, <b>las acciones de
Nintendo llegaron a revalorizarse casi un 50% en la Bolsa de Tokio gracias al
juego #PokemonGo,</b> que con una tecnología de realidad virtual invita a capturar personajes dibujados en los años noventa que salen en la calle al encuentro de los paseantes de
carne y hueso. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Pasado el
<i>subidón</i>, las acciones de Nintendo regresaron en dos semanas a su nivel anterior.
Pero en un salto de la Ciencia a la Ficción, <b>un atardecer de octubre tanta
virtualidad se emancipará, crecerá, se multiplicará, poblará la Tierra y, como
predijo Malthus, el horizonte de la humanidad será el hambre. </b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b><br /></b></span></div>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">Los
pesimistas aceptamos con resignación ese mañana inevitable. Los optimistas
intentan averiguar cómo hacer negocio con la extinción que se avecina; <b>un </b></span><a href="http://agostodebajocoste.blogspot.com.es/2016/08/ficcionario-deprendedor.html" style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;"><b>deprendedor</b></a><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;"><b> avispado ya desarrolla planes secretos para colonizar la analógica Luna. </b>De
madrugada, algunos internautas agoreros se burlan en los foros asegurando que
el auténtico secreto radica en que, </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;">en la realidad real,</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%; text-align: justify;"> Armstrong nunca consiguió llegar allí. </span>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-81700582354996534212016-08-12T15:00:00.000+02:002016-08-12T15:00:25.301+02:00Ficcionario: Kuba<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvYMA_wwnPycEbRL1ncBbIoAB723dc93UF5BzIlfMrjCaBdeF_tHQXCtY0rjBeL182UcNOggaTVW8gqJWAvDf-WegNULYvJbbh5sikLFAsC1Tq76UO9dcDhyphenhyphen3nQBWS0x1tPXN-GImgzgg/s1600/kuba.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="230" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjvYMA_wwnPycEbRL1ncBbIoAB723dc93UF5BzIlfMrjCaBdeF_tHQXCtY0rjBeL182UcNOggaTVW8gqJWAvDf-WegNULYvJbbh5sikLFAsC1Tq76UO9dcDhyphenhyphen3nQBWS0x1tPXN-GImgzgg/s320/kuba.png" width="320" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>El pasado 20
de mayo 21 <i>balseros</i> cubanos permanecieron
encaramados durante ocho horas en un faro en desuso llamado "American Shoal"</b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b> y
situado a algo más de seis millas náuticas de Florida. </b>Allí se dirigían cuando
vieron acercarse a una embarcación de la Guardia Costera estadounidense. Para
evitar ser detenidos, se lanzaron al agua y treparon por la instalación,
construida en 1880, cuando la isla de la que habían partido era todavía una
colonia española.</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Como si
intentaran regresar al pasado, estos emigrantes furtivos vieron en aquella
vieja estructura su última esperanza. Pensaron que era territorio de Estados
Unidos y que al tocarlo tendrían que ser
aceptados por ese país, como establece la política de "pies secos, pies
mojados". Tras un intenso tira y afloja, la mayoría accedió a descender. Otros
optaron por mantenerse escondidos, aunque bajaron un día más tarde. <b>Comenzó
entonces para todos una estancia de cinco semanas en un barco a la espera de
que un juez dictaminara si habían<i> tocado suelo</i> </b>y tenían derecho a quedarse, o
si por el contrario debían ser devueltos a Cuba. </span></div>
<a name='more'></a><o:p></o:p><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Como le
ocurrió a Colón con el Nuevo Continente, de forma inconsciente </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">estos náufragos
voluntarios habían descubierto y fundado en un faro, a cien metros de altura,
su efímera <span style="color: #bf9000;">Kuba</span>. </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Un diminuto estado </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">okupado</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">
que mantiene a sus habitantes a la deriva y a la vez anclados al tiempo. Una
</span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">relikia histórika enklavada</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> en el</span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> Karibe</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">, nieta de la lucha contra el</span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> kolonialismo
</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">en siglo XIX, hija de la pugna entre </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">kapitalismo</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> y</span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> komunismo </i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">del siglo XX,
rehén de los </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Kastro</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> en el XXI, </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">kondenada kada </i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">día a no </span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">kaer</i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">¿<b>Eran balseros o eran una metáfora?</b> ¿Y si en realidad es Raúl Castro quien se ha
lanzado a las aguas de Obama para no ahogarse, pero necesita quedarse a medio
camino para no perder pie en la isla? ¿Y si, como en el faro, la mayoría sus residentes
forzosos preferiría salir de cualquier manera, pero algunos han optado por
resistir otro rato? ¿Hasta cuándo podrán aguantar? ¿Se rendirán también al
fina? ¿Y si esa dictadura añeja fuera algún día juzgada, como los <b><span style="color: #bf9000;">kubanos </span></b>del
“American Shoal”, por leyes ajenas? <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b><span style="color: #bf9000;">Kuba</span>, y por
extensión Cuba, aspiró a ser un sueño que ya no pasa de hipótesis.</b> El martes 28
de junio un juez federal estadounidense resolvió que las leyes migratorias
estadounidenses no afectaban al faro, que los inmigrantes habían sido detenidos
en el mar y por consiguiente podían ser devueltos a su país de procedencia. Consideró el
magistrado que el “American Shoal” era propiedad de Estados Unidos, pero no
parte de su territorio. <o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">A Cuba le
ocurre lo contrario. <b>Debería pertenecer a sus habitantes, pero en nombre de la
abolición de la propiedad se ha convertido en territorio de unos pocos. </b><o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-37585811337115587962016-08-11T11:07:00.002+02:002016-08-11T11:12:32.965+02:00Ficcionario: Juegos Bolímpicos <div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjYWILAlq-A2L1MpDNqNX1Hh2AtTW6VPTbdkf0qUUAOH8U_7g_ZF1GdV_yn7tU964U0WWFE5fhidgCqiYWKN1ZH2o7TF9aYC-f5eBnKZujhcfy4uqTu4jhW5Ljx9_lzyaQgmNfxU5e8vr8/s1600/bolimpicos.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="280" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjYWILAlq-A2L1MpDNqNX1Hh2AtTW6VPTbdkf0qUUAOH8U_7g_ZF1GdV_yn7tU964U0WWFE5fhidgCqiYWKN1ZH2o7TF9aYC-f5eBnKZujhcfy4uqTu4jhW5Ljx9_lzyaQgmNfxU5e8vr8/s320/bolimpicos.png" width="320" /></a><span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Unos cuatro
kilos suele perder a lo largo de la temporada el triatleta Javier Gómez Noya</b>,
pentacampeón mundial de la especialidad, medalla de plata en los Juegos de
Londres en 2012, Premio Princesa de Asturias del Deporte y, para desgracia de todos, ausente en Río de Janeiro. Unos cuatro kilos
puede ganar en sólo dos semanas, si no
escatima esfuerzos, cualquier aficionado entregado al sacrificio
de disputar con febril intensidad desde el sofá los Juegos Olímpicos.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"> <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
</div>
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Mientras nuestros representantes sudan, <b>miles de<span style="color: #f1c232;"> bolímpicos</span> </b></span><i style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>vagoréxicos</b></i><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b> nos tocamos -con perdón- <i>las bolas</i> en el sprint final de esta maratoniana
temporada deportiva. </b>Sólo en las últimas semanas hemos corrido sin bicicleta al ritmo de Froome
por las rampas del Mont Ventoux, hemos sudado como los dirigentes</span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">del PP para borrar los discos duros de los
ordenadores de Bárcenas, hemos disfrutado más que el peluquero de Messi. Y aquí seguimos, como si tal cosa, listos para el siguiente esfuerzo. </span></div>
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"></span><br />
<a name='more'></a><div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">La vibrante variedad
del programa nos invita a <b>dar un salto
cualitativo sin quebrar la horizontal para inventar aerodinámicas posturas</b> que
hagan compatibles los pies en alto con la visión panorámica y la atención
permanente a la doble pantalla. Hasta el concurso
de doma clásica puede resultar apasionante gracias a </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">los comentarios en Twitter. </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Competimos por
la noche sin dejar de ejercitar durante el día nuestro propio triatlón. Paseo en bici al súper para comprar unas cervezas, legañas a remojo aprovechando las rondas preliminares de gimnasia rítmica o el lanzamiento de peso, trotecillo cochinero en chanclas al bar para leer el “Marca” y comentar la jugada con
otros hijos adoptivos de Homer Simpson. <b>Competimos por separado, pero fieles al espíritu de Coubertin, formamos parte de una familia, practicamos un idéntico y (poco) sano estilo de vida. </b><o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Algunos héroes, los menos, han seguido ascendiendo por la senda
de la superación personal a la búsqueda de nuevos límites. Los Juegos de Invierno, por ejemplo. Una noche de asfixiante agosto, un
<b><span style="color: #f1c232;">bolímpico </span></b>con vocación enciclopédica trató de introducir al atónito parroquiano
de un bar de camping en los secretos del curling. "Los hielos, para el cubata", remató cuando ya emprendía el camino hacia su trinchera en el sillón. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Compartamos nuestros códigos. </b>Una mirada escrutadora antes de la competición, fingida
indiferencia durante el desarrollo, ligeros sudores en la hora decisiva, una
lagrimita furtiva –"¡qué grande!"- en caso de récord mundial. Y, por supuesto, máximo respeto a los himnos. Lo expresaremos levantándonos para desentumecer los músculos. Puede que por descuido perdamos un par de calorías. No importa: remontaremos. <b>Nuestra patria es el deporte.</b>
Pasivo. <o:p></o:p></span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-60959286774593320072016-08-10T11:14:00.000+02:002016-08-10T11:19:33.651+02:00Ficcionario: Ignocracia<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">5.208.000 artículos
acoge en este instante la Wikipedia en inglés, cerca de 1.800.000 en
francés, más de millón y cuarto en
español, unos 231.000 el Vikipedio en esperanto. <b>Suponiendo que la sabiduría
fuera única y universal, su compilación se traduce en distintos tamaños para
idiomas diferentes, </b>aunque alojados todos en Internet. Suele decirse que gracias a la Red
tenemos acceso a ignotas bibliotecas reales, también a la biblioteca de Babel
de Borges, pero lo cierto es que preferimos otros destinos turísticos, y no debido
al precio. La libertad reside en tener opciones más que en aprovecharlas: leer
o no leer. Y sin embargo, no da igual. Lo primero puede ayudarnos a todos. <b><o:p></o:p></b></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgElrKL83vKS_lioqrj-AhzdlzUp51aZ12Zp7MAOoSDqIrxjNYkU4Y3-_bc3iTtvb3U8yX3mkSHjDXqEEtTDffouJUU-xYKnaSWqGxwlXC_FUUIwXILcIzxD_qT7Ih6bUM9v7UQOWUOjqs/s1600/vikilogos.png" imageanchor="1" style="clear: left; float: left; margin-bottom: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="102" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgElrKL83vKS_lioqrj-AhzdlzUp51aZ12Zp7MAOoSDqIrxjNYkU4Y3-_bc3iTtvb3U8yX3mkSHjDXqEEtTDffouJUU-xYKnaSWqGxwlXC_FUUIwXILcIzxD_qT7Ih6bUM9v7UQOWUOjqs/s400/vikilogos.png" width="400" /></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Mariano
Rajoy, que es precisamente la opción preferida de los españoles, recibió
7.215.752 votos en las elecciones de diciembre de 2015. </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">¿Les parecen
demasiados? ¿Y comparados con otros líderes mundiales? </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Unos 19 millones de
reproducciones había contabilizado en esas fechas el vídeo “Charlie Charlie Challenge”
de El Rubius.</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> Por ceñirnos sólo a la política, los 105.963 votos que recibió en
mayo de ese año Rita Barberá como candidata a la alcaldía de Valencia van
menguando frente a las casi dos millones y medio de veces que ha sido visto el
remix de Iván Lago sobre su inspirador ¿discurso? del “caloret”. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"></span></div>
<a name='more'></a><o:p></o:p><br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Si la
comparación entre peras y manzanas (aunque puedan convivir) necesariamente conduce al
absurdo, </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">la asociación de conceptos como “cifras” y “democracia” nos pone
a veces cara de pato, </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">con el gesto contrariado de quien se quedó
compuesto y sin wifi cuando la prórroga entraba en el último minuto.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Sin embargo,
frente a interesadas posiciones elitistas,<b> “mayorías” y “gobierno” mantienen
una relación tormentosa pero por fortuna reversible. </b>Porque los riesgos
existen. La hegemonía de las emociones en la televisión y en las redes sociales transmite sin
filtro miedos bien atizados, un puñado de estereotipos convenientes,<b> “esto lo
arreglo yo”, el alma del populismo, las trampas de Trump.</b> Votar para
desahogarse puede ensanchar ocho horas una sonrisa maliciosa pero, una vez
aliviados los esfínteres sobre la urna, algunos resultados como el Brexit son
tan perjudiciales como respetables.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">En la peor
de las aproximaciones, millones de ignorantes elegimos quién va a gestionar los
asuntos de todos. Pero la propia conciencia de estos riesgos políticos
constituye en sí misma un excepcional avance; <b>a las dictaduras nunca les
preocupó la ignorancia. </b>Vale, ya lo enunció Sócrates, pero sólo han pasado dos
milenios y medio. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Tampoco descarguemos en Google las
responsabilidades sobre la cosa pública. </b>El buscador, tan capaz de encontrarnos
múltiples soluciones ajenas a los empeños cotidianos, patina sobre los grandes
asuntos de la existencia. <b>Regala millones de ladrillos pero nos regatea los
planos. </b>Por ejemplo, al preguntarle por la “sabiduría” sin apellidos, el
listillo global insinúa que puede interesarnos la sabiduría “virtuosa”,
“interior”, “garantizada” o “popular”. Ante semejante exhibición, no sabemos/no contestamos. </span><br />
<b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></b>
<b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">La sabiduría
se sirve hoy líquida, en raciones a medida y para compartir. </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> Pero hay esperanza. Todas las versiones de la Wikipedia consultadas coinciden en que la auténtica Enciclopedia
de la Ilustración, escrita en la segunda mitad del siglo XVIII, consta
exactamente de 71.818 artículos. Al final el conocimiento solidifica y sedimenta.
Es cuestión de días, meses, años, décadas, siglos. Tiempo. Justo lo que más echamos en falta. </span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-52317712030582391112016-08-09T19:10:00.000+02:002016-08-09T21:34:51.057+02:00Ficcionario: Hemingrey<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Ernest come poco, sólo bebe agua y no caza más que resfriados en primavera. </b>Al concluir la merienda, le toman la tensión -por segunda vez- e intenta completar un crucigrama. Comienza
por las horizontales para evitar el vértigo. Lo llena de tachones y termina </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">irritándose. </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Si nadie le observa, </b><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">el pasatiempo concluye con un periódico enrollado que aprende a volar desde la ventana y aterriza desmadejado en el jardín.</b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> Los
latidos se ralentizan, dormitan al fin los fantasmas, la taquicardia da paso a la pausa. </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Suele aparecer entonces esa señora miope con una
conversación intrascendente que al principio le fastidiaba y ahora le sirve para ejercitar su personaje. <b>Y él aprovecha para </b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>fabular sin disimulo, </b>insertando mujeres y aventuras en la vida insípida de un niño tímido que a base de perseverancia consiguió ser bibliotecario. <b>Se regodea narrando amistades incondicionales para engañar el olvido en vida</b> del jubilado solitario al que sus hijos, siempre tan ocupados, han dejado de visitar. Luego cena en silencio, lee un rato los mismos párrafos, a veces reza no sabe a quién, procura dormir. </span><br />
<a name='more'></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Hace días una conocida de la juventud que se había unido a la conversación le preguntó a quemarropa si no le hubiera gustado ser un escritor famoso "de esos que firman libros y aparecían antes en televisión". </span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Al principio, como si no hubiera oído, Ernest distrajo el enojo con el crucigrama. Treinta segundos más tarde estalló de ira. “No me amargues los míseros momentos que aún puedo disfrutar". </span><b style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Un ejemplar desencuadernado de "Fiesta" sobrevoló la
sala de estar donde todos, efectivamente, se dedican a estar sin más, como ausentes. </b><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">El llanto contenido en voz baja,
la enfermera y el sedante. El volumen, más alto de lo normal, de una telenovela. Suave acento venezolano. (Ya no hay programas con escritores). </span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Ernest nunca cuenta que él también pensó en suicidarse.</b> Fue al tercer mes en la residencia. Ansiaba un final trágico, con protagonismo y algo de grandeza. Le frenó, cómo sortearlo, el sentido práctico de las personas mayores. ¿Quién iba a conseguirle una escopeta? ¿Cómo iba a aprender a usarla? ¿Y si hacía el ridículo? ¿Qué iba a pensar su familia? ¿Podrían coger el día libre para acudir al entierro?</span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><br /></span>
Ya que no morirá como él, la única vida de Ernest consiste en parecerse, aunque sea un poco, a su escritor favorito. El médico de la residencia dio el enésimo paso hacia la rendición. <b> Tampoco podrá viajar a Estados Unidos a competir en el concurso de dobles del Nobel, pero hasta eso ha dejado de importarle.</b> Lo lamenta a su manera, coleccionando <span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">anuncios. <i>Puenting</i>, carreras de
montaña, batallas de <i>paintball</i>. Los recorta con unas tijeritas y los encarta
metódicamente entre las hojas vírgenes de una agenda negra que ha titulado “Experiencias”. </span><br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b><br /></b></span>
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"><b>Anoche vivió, triste consuelo, su última expedición a la enfermería para que le extrajeran una
espina rebelde del pescado y hoy llega un nuevo sobresalto. </b></span><span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;">Para la función de esta tarde le han pedido "una
poesía o un cuento sobre personas mayores". Le da pereza, pero entre tanta grisura quizá pueda arrancar un baile a esa señora. La camarera se acerca complaciente:<b> “¿Desea probar el cochinillo, señor Ernest, o un vasito de vino con gaseosa?”</b> Acostumbrado a tanto "no", rechaza el ofrecimiento con la cabeza. “Podría sentarme mal, sólo quiero verdura hervida”. La aventura está sobrevalorada. </span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-2031037717548762452.post-12673317773780723732016-08-07T21:00:00.000+02:002016-08-09T19:38:19.548+02:00Ficcionario: Gañanistán<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">No aparece
en los atlas geopolíticos y su población flotante no conoce más gobierno que
los bajos instintos. <b><span style="color: #bf9000;">Gañanistán </span>es un estado sin dignidades que se instala allá donde
alguien que por treinta minutos se siente poderoso alquila el uso de los orificios corporales ajenos.</b> Consumida la carne, recompensada la discreción, el pagador barrunta que no
será difícil vencer otras resistencias. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">“Habéis
declarado muy bien, vamos a celebrarlo con volquetes de putas”, prometió, según
se escucha en una grabación, un cargo público de la Comunidad de Madrid a los
agentes que evitaron implicarle ante el juez en una red de corrupción y
espionaje a otros dirigentes. Volquetes, putas y políticos compondrían
cualquier escena caricaturesca en una película de Torrente.<b> Fuera de la
pantalla representan el declive moral novelado por Chirbes, el sórdido descenso
de Berlusconi al abandono abusivo en su villa bunga-bunga.</b></span><br />
<a name='more'></a></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">En
<b><span style="color: #bf9000;">Gañanistán</span></b> pasan temporadas, fruto de su notoria incultura, triunfadores inmaduros que remojan su ascenso social en orgías organizadas por WhatsApp. Millonarios, traficantes y mercancía vinculados
por un fajo de billetes. <b>Liquidez en unas manos sudorosas, el dinero como frontera que sentencia de qué lado descansa el éxito, dónde corre a refugiarse el fracaso. </b>Quién compra,
qué se vende y, lo más importante, cuánto se lleva el intermediario. Negocios impersonales con personas. <o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>Algo oscuro tiene España que atrae a reputados talentos <i>gañistaníes</i>. </b>A nuestra bien nutrida
selección nacional se unen gángsters británicos, mafiosos rusos, asaltapisos de
origen balcánico. No tendrán fácil elevar el listón. Juan Antonio Roca, cerebro
urbanístico de la Marbella podrida, colgó un Miró en el cuarto de baño para
alegrar la vista mientras daba curso, como si fuera otro expediente amañado, al
apretón intestinal. <o:p></o:p></span><br />
<br /></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;">Encabeza el ubicuo <b><span style="color: #bf9000;">Gañanistán </span></b>una alianza de pequeñas incivilizaciones a escala personal. De gritos nocturnos, de batallas campales a la puerta de los estadios, de lanzamiento de basura por la ventanilla del coche en marcha. </span><br />
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><br /></span>
<span style="font-size: 12.0pt; line-height: 115%;"><b>La enconada clientela del
“por-mis-cojones” a duras penas tolera la contención. </b>Y algunos casos aún se dan. Vicente del Bosque heredó un equipo campeón sin ruido, ganó un Mundial sin
ruido, sin ruido revalidó el título de la Eurocopa, fracasó en Brasil sin ruido
y el segundo patinazo puso un merecido final a su ciclo. Cuando pretendió por vez
primera hacer ruido criticando en público la actitud de Iker Casillas, se encontró a disgusto y prefirió reconciliarse con el portero dos días después. Fue el suyo un intolerable desafío a los puñales de esa patria gritona que en por desgracia tiende a identificarse con lo peor del fútbol. Desde entonces, el ex seleccionador da y recibe lo mejor que puede disfrutar una persona sometida durante años al examen público: silencio. </span><br />
<br />
<span style="font-size: 12pt; line-height: 115%;"> </span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00555516754111984667noreply@blogger.com0